The Elder Scrolls IV: Oblivion
The Elder Scrolls IV: Oblivion - Irritados por los dioses
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Me explicó que compró un bastón encantado a muy buen precio, al comprarlo le extrañó que fuera tan barato y en cuanto el vendedor cogió el dinero se fue echando leches. Desde que este bastón está en su poder los diablillos la seguen por todas partes. Me dijo que la ayudara, que fuera a pedirle alguna explicación a la persona encargada del Gremio de Magos de la localidad.
Allí fui, al entrar el mago me dijo "¿vienes por el tema de los diablillos?", y yo le dije que "sí" y que como sabía que se trataba de eso. Parece ser que pisé un excremento de uno de ellos en la casa de la señora (jajaja). En resumen, me dijo que el bastón tenía un hechizo. El creador le puso al bastón esta especie de maldición y la única manera de liberarse de ésta sería ir a la cueva a la que pertenece y depositar el bastón en el altar, y eso mismo hice.
Volví a la casa de la señora, y encantada de la vida aceptó mi propuesta de llevarme el bastón a la cueva y dejarlo allí. Me habló de una recompensa y terminó de convencerme.
Una vez en la cueva y tras ir cargado con los diablillos todo el camino, entré. La entrada era húmeda y maloliente. Camino al altar me extravié un par de veces y también me encargué de unos cuantos diablillos por el camino. Nada más llegar, dejé el bastón sobre el altar y la maldición desapareció. ¿Mi sorpresa? que los mismos diablos que llevaba todo el camino se pusieron en mi contra e iban a matarme. ¡Já! ignorantes... Saqué mi espada de plata y no me duraron ni dos asaltos.
En esas me dice que la ayude, y claro, yo generosamente me ofrecí. Me dijo que un brujo le vendió un Bastón Daédrico. Cuando tradujo un escrito en éste y lo repitió en voz alta invocó accidentalmente a unos diablillos. Me pidió que hablara con Alves Uenium en el Gremio de Magos para que la ayudara. Al hablar con Alves, ella me dice que tengo que llevar el bastón a una cueva y dejarlo en el altar.