Commandos
Commandos - Misión 8
Un musculoso boina verde, un conductor especialista en armamento pesado alemán, un marine con mucho mar navegado, un zapador apodado "fireman", un francotirador de excepcional puntería y un espía experto en disfrazarse y hacerse pasar por alemán; estos son los hombres con los que contamos para desbaratar los planes nazis de conquista de Europa y el norte de África.
MISION 8: EJERCICIO PIROTÉCNICO
(19 de Octubre de 1942)
Tu labor en esta misión consiste en destruir unas instalaciones enemigas ubicadas al sur de tu posición. Cuentas únicamente con el boina verde y el francotirador para llevar a cabo semejante tarea, pero como comprobarás, son más que suficientes.
Antes de nada, oculta tu francotirador tras el muro de tu espalda. Los soldados que tienes alrededor pueden ser eliminados usando el señuelo acústico de tu boina verde. Colócalo en primer lugar en la esquina superior, cerca del borde de la pantalla, y vuelve rápidamente a sitio seguro antes de que el soldado sé de la vuelta. Activa el señuelo y cuando el soldado quede mirando hacia arriba encárgate de él con el cuchillo y tráelo a tu posición original, lejos de miradas indiscretas.
Ahora harás lo mismo pero con el guardia que patrulla en el otro lado, a tu izquierda, colocando el señuelo muy cerca de la entrada por donde ha pasado tu francotirador.
Coloca ahora el señuelo al otro lado del muro desde donde estás a salvo, en la habitación por donde patrullaba el soldado que mataste en primer lugar, y regresa a salvo. Activa el señuelo y cuando el soldado que patrulla por la habitación de abajo venga a ver, sal de tu escondite y acaba con él.
El guardia que está apostado en la otra habitación, estático y mirando hacia donde tú tienes que pasar puede caer fácilmente si esperas a que su halo de visión te deje un hueco para acercarte pegado al muro, corriendo, y colocarte a su espalda para pasarlo por el cuchillo. Ahora coloca la radio justo en el extremo del muro que éste guardia miraba, detrás del guardia que está de espaldas, y enciende la radio. Da la vuelta ahora y acaba con ese guardia que permanecía estático impidiéndote el paso.
Ahora pasarás por entre los dos barriles a la primera habitación, aprovechando que el guardia que patrulla en su interior está de espaldas y dándole un toque de machete. Oculta el cadáver en la esquina más alejada y pasa a la pequeña habitación que tiene anexa.