Commandos
Commandos
Un musculoso boina verde, un conductor especialista en armamento pesado alemán, un marine con mucho mar navegado, un zapador apodado "fireman", un francotirador de excepcional puntería y un espía experto en disfrazarse y hacerse pasar por alemán; estos son los hombres con los que contamos para desbaratar los planes nazis de conquista de Europa y el norte de África.
Luego, se colocará detrás del soldado que está apostado al lado de la caseta de guardia y lo eliminará con la jeringuilla en cuanto la patrulla vaya hacia arriba, luego cogerá el cadáver y lo esconderá en la parte trasera de la cabaña, justo a las espaldas del hombre que mira por el barranco. Este hombre, por cierto, será tu próxima víctima utilizando el mismo procedimiento.
Ahora debes eliminar al soldado que patrulla en el área superior. Debes hacerlo mientras la patrulla no mira, y luego llevártelo donde has ido dejando los otros cadáveres aprovechando las dos cabañas para burlar a la patrulla: no hay otro sitio donde esconder los cadáveres. Hecho esto, el espía distraerá a la patrulla hablando con su jefe de forma que no miren al barranco.
El boina verde, entre tanto, correrá hacia la parte rocosa de la montaña con la simple precaución de mantener alejadas a las dos patrullas que quedan, y con cuidado de utilizar la misma ruta para acercarse que la patrulla que ronda por la parte inferior del mapa. Una vez allí escalará sin problemas hasta la parte superior de la montaña y se esconderá en la nieve, más o menos donde está el barril y justo detrás de la patrulla que está siendo distraída por el espía. Nadie hará nada hasta que las huellas desaparezcan.
Cuando eso ocurra, el espía dejará de distraer a la patrulla, que seguirá su rumbo, momento que aprovechará el boina verde para correr a enterrarse en la nieve detrás de la cabaña o en algún otro lugar seguro. Cuando la patrulla pase entonces al lado del barril más cercano a la caseta de guardia, el espía disparará contra éste haciendo volar la misma, y llevándose de paso a dicha patrulla.
Como ya no queda nadie arriba, el boina verde arrimará un par de barriles al radar y disparará luego contra éstos. Sólo queda subir al autogiro para cumplir felizmente la misión.