Guía Sekiro - Regreso al embalse de Ashina
Volvemos al embalse de Ashina en Sekiro: Shadows Die Twice para PC, PS4 y Xbox One. Os contamos cómo conseguir todos los tesoros de esta zona.
Una vez que llegamos al Castillo Ashina, tenemos la ocasión de volver al Embalse de Ashina para enfrentarnos a nuevos enemigos, y recoger tesoros extra. En esta sección de nuestra guía completa de Sekiro: Shadows Die Twice para PC, PS4 y Xbox One, os contamos cómo superar esta zona.
¿Cómo llegar al Embalse de Ashina desde el Castillo Ashina?
Desde el ídolo - Castillo Ashina, utilizamos el gancho desde el puente para llegar al otro extremo. Un poco más adelante encontraremos a un par de enemigos en un puente, a los que podemos espiar. Debemos matarlos, y uno de ellos soltará la llave de la garita.
Con este objeto en nuestro poder, volvemos al ídolo - Castillo Ashina. Avanzamos, y vamos hacia la izquierda. En lugar de entrar por la puerta que tenemos a la derecha, saltamos sobre el muro y nos tiramos al foso. Salimos a la superficie usando el gancho. Cerca tenemos hierro. Desbloqueamos la puerta, entramos, y nos tiramos por el agujero a la planta inferior. Desbloqueamos esta otra puerta, y habremos llegar al Embalse de Ashina. Cerca tenemos el ídolo - Embalse de Ashina. Estamos exactamente en el punto en el que nos enfrentamos al minijefe Líder Shigenori Yamauchi.
Regreso al embalse de Ashina
Desde donde estamos, vamos a limpiar en primer lugar el camino de enemigos y tesoros que nos llevaba hasta la puerta desde la que tuvimos que avisar a Lord Kuro. Vamos hacia la izquierda, y vamos bajando por debajo del puente. Encontraremos hierro, otros tesoros menores, y varios enemigos rata. Una vez despejada el área, volvemos al ídolo - Embalse de Ashina.
Justo enfrente tenemos un par de soldados a los que podemos espiar. Son fáciles de matar, aunque no os confiéis, porque cerca hay perros. Con los enemigos muertos, en lugar de ir por la puerta, lo que haremos será trepar por unas ramas del lado izquierdo, para luego colgarnos al muro, y ver mejor el panorama. La zona está repleta de enemigos. Os recomendamos que matéis en primer lugar al enemigo débil que da la alarma, y, desde ahí, es posible matar a todos —incluyendo los dos ogros— siendo sigilosos.
Con la zona despejada, podemos entrar en la casa cuyo suelo está hueco usando la llave de la garita y recoger de su interior el Cuerno roto de Gyobu, un material para fabricar una nueva herramienta shinobi, la lanza cargada.
Hecho esto, salimos, y vamos hacia la izquierda, hacia la torre lunar en la que estaba Kuro recluido en el prólogo. Por el camino veremos a un minijefe muy peligroso, Siete lanzas de Ashina - Shikibo Toshikatsu Yamauchi. Quitarle la primera barra de vida usando sigilo es prácticamente obligatorio. Hecho esto, os recomendamos envenenarlo o prenderle fuego para quitarle mucha vida y hacer que su postura se rompa rápidamente. También podéis realizarle Mikiris a sus ataques de embestida. Al derrotarlo obtendremos una cuenta de oración.
En el interior de la torre en la que estaba Kuro durante el prólogo, encontraremos un vestigio. En la entrada del pozo en el que comenzamos el juego nos encontraremos al NPC Jinzaemon Kumano. Está buscando el origen de una melodía. Por ahora no podemos hacer nada con él salvo agotar sus diálogos. Si volvemos al pozo, nos encontraremos al minijefe Sombra solitaria espada larga que a priori no será hostil. Os recomendamos que le realicéis un golpe mortal para quitarle una barra de vida. Hecho esto, mantened la presión alternando entre desviar y bloquear sus ataques, y golpearle con la espada.
Tras derrotarlo obtendremos magnetita, y una cuenta de oración. Si continuamos hacia adelante, llegaremos a la Mazmorra abandonada. Aunque no os recomendamos ir por aquí, al menos aún, ya que justo delante nos enfrentaremos contra un poderoso minijefe, un Guerrero Shichimen.