El Mirandés afronta con ilusiones renovadas la temporada 2020-21. En su regreso a la categoría de Plata, el conjunto de Anduva firmó una campaña inolvidable con una clara apuesta de futuro a la que se le ha dado continuidad desde la dirección deportiva. Los rojillos finalizaron el campeonato en mitad de la tabla, undécima posición, con 56 puntos; pero por momentos llegaron a soñar con la posibilidad de jugar la fase de ascenso. Sin embargo, un cúmulo tanto de lesiones como de sanciones en momentos clave les privaron de pelear por un hecho histórico.

De nuevo gran parte de los aficionados al deporte rey fueron durante la temporada un poco más del Mirandés, que volvió a hacer una de las suyas en la Copa del Rey. Celta, Sevilla y Villarreal cayeron ante una escuadra que realizó un fútbol de ensueño, sin complejos y con rápidas transiciones que siempre hacían daño a la defensa contraria. El delantero brasileño Matheus se convirtió en el Pablo Infante de 2012, otro año muy recordado en Anduva. Sus goles estuvieron a punto de meter al equipo en la gran final, que aún está por disputar. Solo la Real Sociedad fue capaz de eliminar al cuadro jabato, y con dos dianas desde los once metros (1-3 en el global de la eliminatoria).

La confección de una plantilla joven y las cesiones de calidad son de nuevo la clara apuesta del club mirandesista. Llegaron Berrocal, Vivian, Iván Martín, Schutte y Jirka como préstamos. El último con una opción de compra al término del curso. Además, el área deportiva ha realizado un exhaustivo seguimiento de otras ligas como las de los países balcánicos que ha dado como resultado dos incorporaciones al equipo: el lateral izquierdo Bojan Letic y el extremo eslovaco Erik Jirka.

Andoni Iraola dejó el listón muy alto y su sustituto, José Alberto López, es consciente, aunque el entrenador asturiano espera sacar el máximo rendimiento a sus jugadores con el fin de desplegar un fútbol atrevido sobre el césped. Queda mucho trabajo por hacer y todavía quedan hasta una decena de jugadores por llegar, sino son más, para completar la plantilla.

José Alberto López tiene ante sí el reto de buscar, como objetivo principal, la permanencia en Segunda con el club mirandesista. Será su segunda experiencia en la categoría tras su paso por el Sporting de Gijón al que dirigió un total de 53 encuentros, con un balance de 20 victorias, 15 empates y 18 derrotas. El técnico asturiano inició su carrera deportiva en el fútbol base del Astur. Después pasó a formar parte del Juvenil del Club Deportivo Vallobín. En 2008 se incorporó a la Escuela de Mareo donde entrenó a los equipos infantiles. Cinco años después debutó en Tercera División con el Covadonga para luego dar el salto al filial blanquirrojo. Allí consiguió hasta la fecha sus mejores logros: primero, el ascenso a Segunda B y, un año después, la clasificación para el playoff a Segunda.

Era deseo del club que Iraola permaneciese una temporada más al frente del equipo, pero su negativa precipitó los acontecimientos. Sonaron varios nombres como futuribles inquilinos del banquillo de Anduva. Sin embargo, el perfil de José Alberto encajaba a las mil maravillas en la idea de trabajo de la dirección deportiva, que encabeza Chema Aragón. Con el míster ovetense al frente, el Mirandés quiere seguir haciendo ruido en la categoría. “Nuestra ilusión es trabajar cada día al máximo. Me gusta ser equilibrado. El entrenador tiene que adaptarse también a la plantilla que tenga y a partir de ahí construir un estilo que sea atrevido y competitivo”, apuntó en su presentación oficial.

El Mirandés ha invertido tiempo y dinero en el seguimiento pormenorizado de diferentes ligas en las que encontrar talentos, que permitan dar un salto de calidad al equipo. La dirección deportiva ha hecho especial hincapié en los países balcánicos. Del campeonato serbio, el club ha acordado la cesión del extremo Erik Jirka, procedente del Estrella Roja. Incluso la entidad que preside Alfredo de Miguel se reserva una opción de compra, que ronda los 700.000 euros, a la finalización de la temporada. Nacido en la localidad eslovaca de Trnava, Jirka se formó en las categorías inferiores del Spartak Trnava. Con el primer equipo disputó 103 partidos en los que marcó 14 goles y dio un total de 12 asistencias. Su evolución no pasó desapercibida para el Estrella Roja que se hizo con sus servicios en 2019. La falta de minutos propició su cesión, primero al Radnicki Nis serbio y después al Górnik Zabrze polaco. El jugador ha sido internacional con su país en la selección Sub18, Sub19 y Sub21 con la que anotó un tanto. Su buen hacer también se ha visto recompensado al ser incluido en la lista como reserva del combinado absoluto para la disputa de la Liga de Naciones.

El talento del joven centrocampista bilbaíno estará al servicio del Mirandés a lo largo de la nueva campaña. Llega cedido por el Villarreal que espera adquiera experiencia en la categoría de Plata defendiendo la camiseta rojilla. Tras una prometedora trayectoria en las categorías inferiores del submarino amarillo, Iván Martín debutará en Segunda aunque ya, en la temporada 2018-19, debutó con la primera plantilla en el choque de Copa del Rey ante el Espanyol. Se trata de un jugador zurdo de gran calidad técnica que puede desenvolverse tanto en bandas como en la posición de mediapunta. “Mi puesto en el campo dependerá de cómo se encuentre el partido. Hasta ahora me he encontrado muy cómodo en el centro. Mi objetivo es hacer una gran temporada que me permita volver al Villarreal”, afirma el jugador vasco. También destaca por una amplia visión de juego y posee gran habilidad en las conducciones de balón.

Si la temporada pasada fue atípica, ésta tiene pinta de que puede ser la más singular de la historia del fútbol. La idea del Mirandés parece, desde fuera, que se basa en invertir en lo indispensable en el proyecto deportivo ya que el club necesita mejoras en las instalaciones de Anduva, y es prioritario mantener la salud económica. De cara al nuevo proyecto, se están incorporando gran cantidad de jugadores cedidos. Un plan muy diferente al de las primeras temporadas del equipo en la élite profesional en las que se apostó por la incorporación de futbolistas en propiedad. La temporada 2019-20 fue extraordinaria, con gran parte de la base del equipo que consiguió el ascenso a Segunda División. Se confeccionó una plantilla excepcional y el poso que queda entre los aficionados rojillos es que, de haber contado con todos los jugadores al inicio de la pasada pretemporada, el equipo podía haber luchado por situarse en puestos de playoff.

La nueva campaña es un interrogante debido a que el conjunto mirandesista se encuentra en plena construcción y sin una médula espinal del pasado curso. Sin jugadores referencia en el actual bloque, salvo Limones y Carlos Julio; para conseguir objetivos ambiciosos se necesitará tiempo y un bloque consolidado, como es el caso del Cádiz que se ha basado en una idea clara que tras varios años ha fructificado con el ascenso a la máxima categoría. El Mirandés es un club saneado y perfectamente puede luchar por alcanzar cotas más altas. Y la Sociedad Deportiva Eibar es un buen espejo donde mirarse. En un principio los partidos se desarrollarán sin aficionados de los equipos en las gradas. Esta circunstancia puede convertirse en un gran inconveniente para los rojillos. Y es que ha quedado demostrado que la hinchada del Mirandés suma muchos puntos a lo largo de una temporada.

*Toño Casado fue el entrenador del Mirandés consiguiendo jugar el play-off de ascenso a 2B en dos ocasiones en las temporadas 1999-2000 y 2000-2001.

Se inauguró oficialmente el 22 de enero de 1950, pero el primer partido oficial se celebró el 18 de septiembre de 1949 con motivo del inicio de Liga. En 2015 tuvo su más reciente renovación, con la construcción de una nueva “Grada Lateral General” con capacidad para 3.250 espectadores.

Predominio del 1-4-2-3-1

La marcha de Iraola trastoca la idea de fútbol valiente que tenía el Mirandés. No obstante, su sucesor, José Alberto López, ya ha anunciado su intención de tener un equipo atrevido, que juegue al ataque. Su etapa en el Sporting le define como un entrenador equilibrado.

Por ello, todo apunta a que jugará con un 4-2-3-1 con Mario Barco como lanza provisional. En banda derecha, el prometedor Jirka promete dar muchas alegrías a Anduva. Meseguer acompañará a Caballero en el centro del campo, con la posibilidad de dar entrada a Andrés.