Dark Souls II, guía completa - La triste retirada

Aquí empieza realmente Dark Souls II. Los primeros enemigos que encontrarás son huecos normales, Lo mejor, es cruzar al otro extremo del río e ir atrayendo su atención de uno en uno. Ten cuidado con el arquero del final que te puede causar problemas.

Al final del río encontrarás un alma de no muerto, pero ten cuidado porque al acercarte aparecerán dos huecos más a tu espalda. Entra en la gruta y sube las escaleras. Arriba la cosa se complica. Los huecos con hacha son los más complicados, y por si fuera poco, en la zona alta hay un arquero disparando.

Intenta protegerte de sus flechas detrás del gran árbol y deshazte de los huecos vigilando en todo momento tu espalda. Ignora al caballero de Heide que está sentado bajo el árbol, al menos, hasta que hayas despejado toda la zona. Ten en cuenta que este enemigo es mucho más fuerte que lo visto hasta el momento.

Sal por el agujero que hay frente al caballero y sube las escaleras para llegar hasta la parte alta. Cuidado con los dos huecos que hay en las escaleras circulares de piedra. Una vez arriba, recoge los tesoros y ten especial cuidado con el arquero que hay al final.

Regresa a la zona circular y ve por el camino que sea adentra en la roca. Si tienes manera de atacar desde lejos, asómate por el agujero de la pared y deshazte del primer enemigo. Ve ahora por el pasillo y cuidado al doblar la primera esquina, hay un hueco esperándote.

Entra en la habitación anterior y deshazte del último enemigo. Destroza la estantería de la pared para recoger un perno de ballesta. Antes de salir de la casa todavía tendrás que pelear un poco más. El momento crítico llega al final. Al llegar a las escaleras, corre y esquiva las flechas.

Cuidado con el hueco que lanza bombas incendiarias desde la parte superior. Una vez arriba, tendrás que lidiar con varios enemigos pero dispones de campo para moverte y esquivar. Por supuesto, si tienes posibilidad de ataque a distancia, acaba con el arquero antes de salir y lo tendrás más fácil.

Recoge el último tesoro que hay en la parte trasera de este tejadillo, junto a otro enemigo armado con un hacha. Finalmente sube las escaleras, y abre la puerta de la Torre del Cardenal para encontrar la segunda hoguera.

Caballero de Heide

Espera a que termine de atacar y golpe una o dos veces antes de cubrirte o escapar. Ten paciencia, aunque le hagas poco daño, cada estocada te acerca más a la victoria. Si lo derrotas (tarea nada sencilla) ganarás la espada de Heide, un arma imbuida con el poder del rayo. Si no te ves preparado, déjalo vivir por el momento y vuelve a por él cuando seas más fuerte.