Assassin's Creed: La Hermandad
Assassin's Creed: La Hermandad, guía completa - El fruto del Edén
Libera a Roma de la tirania de los Borgia.
Sinc 100%: No puedes usar el fruto en ningún momento o perderás la sincronización. Huye de la zona a toda velocidad y salta hacia los lados para esquivar a los guardias. Recuerda que no puedes perder nada de salud.
El Fruto está escondido en la escultura del centro, interactúa con ella para conseguirlo. Ahora debes utilizar el Fragmento para salir del Vaticano. Si quieres conseguir la sincronización perfecta debes huir sin perder nada de salud, esto requiere que domines los poderes del fruto a la perfección.
Cuando activas el Fragmento aparece un anillo que va creciendo. Los enemigos que alcances con ese anillo comenzarán a pelear entre sí o quedarán paralizados. Tras un tiempo aparece un segundo anillo, más lento y poderoso. Este anillo fulminará al instante a cualquiera que toque.
El problema es que para cargar el fruto debes consumir salud. Si la consume por completo Ezio se desmayará, por lo que es aconsejable que lo cargues hasta los últimos bloques de salud, pero nunca por completo. Espera a que se acerquen los guardias para coger al mayor número posible.
Cuando te hayas ocupado de los guardias, espera a que se rellene la vida y sal por la puerta este. Cruza el patio y te encontrarás con otro combate en la puerta. Espera a que se acerquen y fulmina a los guardias. Asegúrate de no vaciar por completo la salud o perderás la sincronización perfecta.
Sal del recinto de la Basílica y corre para salir del Vaticano. Si huyes por los tejados tienes más posibilidades de evitar a los guardias. Si alguno te sorprende activa el Fruto rápidamente para desconcertarlo. Cuando llegues a los límites del Vaticano, salta al río y bucea para perder a los guardias.