007: The World is not enough
The World is not enough
Antes de que la moda por los agentes secretos y los simuladores de espionaje se elevara como la espuma y dejara huella entre los millones de usuarios consoleros, había un hombre solitario enfrentado a toda una corporación de conspiradores, el único que prefería antes una trozo de trapo bañado en éter para adormecer a traición a todos los guardias merodeadores de una zona, que disparar como un descosido ayudado por una AR-90 semiautomática con ráfagas de 15 balas entre descarga.
Volviendo al camino principal, pude seguir mis progresos hasta encontrarme con un ser que se escondía tras muchas cajas de madera, y otros tantos que disparaban desde la zaga. Lo primero que hice fue eliminarlos a todos, aunque me perdiera por el entramado de pasarelas, y es que todas conducían irremediablemente a un edificio. La entrada estaba cerca de más cajas metálicas, presenciadas por otra rampa que llevaba a una especie edificio de comunicación, aunque exteriormente no lo pareciese. Ahí me encontré con unos cuantos guardias en las 3 plantas de que constaba. El segundo y el tercero, eran solo pasillos y barandas, así que tuve que moverme con destreza y evitar ser diana fácil por los lanzacohetes.
Ya arriba, pasando por la puerta que había en el fondo, me hallé ante 3 empleados más que sin temor dejé inconscientes de por vida. Al fondo de ese área, se encontraba mi ansiado ordenador, al que una vez colocado el módem, recuperé sin problemas los archivos que deseaba (E).
Acto seguido descendí por un agujero del suelo donde percaté la presencia de unas escaleras, hasta llegar a ver otro hombre vestido de técnico, y pasando justo después, sobre el puente que llevaba directamente a otro enorme edificio. Por desgracia, algo no parecía funcionar como debiera... (B)(C)(D).