El pensamiento mágico vuelve al Barça

Hace tiempo que el FC Barcelona se ha instalado en un pensamiento mágico altamente tóxico. Está bien tener esperanzas, pero de ahí a vivir de construir castillos en el aire sin asumir la realidad va un trecho. El curso pasado, sin ir más lejos, el Barça inició la temporada diciendo desde el palco y el banquillo que disponían de un “plantillón” para ganarlo todo. Cuando cayó en la Supercopa goleado por el Madrid se dijo que quedaba el triplete. Poco después, el Athletic con goleada otra vez, les dejó fuera de la Copa. Pero ni el palco, ni el banquillo, ni el equipo se desanimaron. Se aferraron a su pensamiento mágico pensando que la remontada en LaLiga era posible y que se podía ganar la Champions. Después de dimisiones en diferido, cenas opíparas en las que a los postres en vez de cantos regionales se cantaba “campeones, campeones”, la historia acabó fatal. Parecía claro que el realismo mágico era una mala opción y que había que volver a poner los pies en el suelo.

Pero no. A día de hoy, con el equipo tan tieso económicamente como antes, o peor, de los creadores de “Bernardo Silva ficha seguro” llega a sus pantallas “Nico fichará por el Barça”. Otra taza de pensamiento mágico.

Lo más visto

Más noticias