Carletto de mi vida

Querido Carlo. Gracias por haber llevado al Madrid a la final de la Champions de esta noche en Wembley. Gracias por haber ganado la Decimocuarta. Gracias por haber ganado la tan ansiada Décima. Gracias por haber hecho crecer a Vinicius y haberle convertido en el mejor del mundo en su puesto. Gracias por haber logrado que Jude Bellingham se haya integrado tan maravillosamente en el equipo y haber descubierto su lado más goleador. Gracias por recordar a Rodrygo cómo hay que respetar a su entrenador aunque no le guste ser sustituido. Gracias por haber transformado a Lunin en un portero de gran nivel. Gracias por haber superado con éxito las terribles lesiones de Courtois, Militao y Rüdiger.

Gracias por no buscar excusas. Gracias por no señalar nunca a un futbolista después de un mal partido. Gracias por asumir siempre tus responsabilidades y también, a veces, las de los demás. Gracias por confiar en jugadores como Nacho y Lucas Vázquez cuando cierta gente los veía acabados para el fútbol de élite. Gracias por tu trato siempre exquisito con nosotros, los periodistas, cuya única y noble misión es informar a los aficionados. Gracias por tu cariño por los madridistas. Gracias por tu sonrisa. Gracias por tu humor. Gracias por tu grandeza. Gracias por tu humildad. Pase lo que pase esta noche: gracias por todo. ¡Y hasta la temporada que viene!

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