La cartera, la cantera y el escudo

Ahora que el Atlético quiere repescar a Rubén Pérez y contar con Borja, Pulido o Sergio Marcos. Ahora que Koke aguanta el tipo sobrado en el primer equipo, incluso sin jugar en su sitio. Ahora que Joel se prepara para la titularidad por la más que posible marcha de David de Gea (hace semanas que se le ve como ausente). Ahora es el momento de apostar con rotundidad y convencimiento por la cantera antes que por la cartera.

Con el Kun Agüero de buque insignia y toda la plantilla con el cartel de transferible, es hora de hacer esa apuesta por los que sienten el escudo. En el Atlético se ha probado de todo en los últimos años. La apuesta por Pitarch y Amorrortu fue muy criticada en su origen por tratarse de dos profesionales sin pedigrí colchonero. Los méritos de ambos nunca han ido de la mano porque el director deportivo no ha trabajado en equipo con el director de cantera. Y los jugadores que llaman ahora a la puerta del primer equipo han completado su formación en el periodo de Amorrortu, pero fueron fichados antes de su llegada como responsable de la cantera del Atlético.

En todas las probaturas de los últimos años nunca ha habido una apuesta decidida y real por la cantera. Hasta la irrupción de Fernando Torres fue una cortina de humo cuando se esfumaba el ascenso tras el añito en el infierno. Y luego no hubo continuidad pese al triunfo de El Niño. Ahora al Atlético no le queda otra. Cuando no hay cartera hay que tirar de cantera. Y de los que sienten el escudo.