Dark Souls
Dark Souls, guía completa - Catacumbas
Las claves para superar el desafiante RPG de From Software.
Rey del Cementerio - Te ofrece el pacto Siervo del Rey del cementerio. Para llegar hasta él, necesitas equiparte en el inventario con un ojo de la muerte (encontrarás en el altar detrás del Demonio Gárgola de Titanita). Con el Ojo equipado, busca un ataúd en el que te puedes introducir. Espera un buen rato (como 30 segundos) y te llevarán ante él.
La entrada a las catacumbas está detrás del segundo grupo de esqueletos. A la izquierda verás unas escaleras pegadas al acantilado. Síguelas y entra en la gruta. Necesitarás bastante nivel para moverte por aquí. Los esqueletos reaparecen cuando los matas, la única forma de vencerlos es matar primero al nigromante de la zona. Aunque no mueren, puedes evitar que reaparezcan si te alejas del lugar donde caen los huesos.
Si bajas las escaleras llegarás a una cámara abierta. No se ve nada, pero hay una pequeña escalera a la izquierda. Abajo está plagado de esqueletos inmortales. Para vencerlos, corre por el túnel de la izquierda y encontrarás al nigromante (ten cuidado porque lanza bolas de fuego). Mátalo y después ocúpate de los esqueletos.
Junto al hechicero se encuentra la hoguera que tomaremos como base para explorar las profundidades.Mueve la palanca que hay al lado y regresa la sala anterior. Continúa hacia la izquierda y encontrarás más esqueletos y al nigromante atacando desde lejos. Si puedes acaba con él desde lejos, sino puedes, aléjate de los huesos cuando caigan y cruza el puente.
Una vez dentro de la cripta es donde realmente se complican las cosas. Si los esqueletos reviven, tendrás que cruzar corriendo y buscar al nigromante. Avanza hasta encontrar una salida y cruza el puente. Baja las escaleras corriendo y verás tres caminos. Si sigues bajando llegarás al herrero; a la derecha encontrarás un nigromante y un interruptor; y por último el hueco de la pared.
Sal por él, déjate caer al saliente y entra en el hueco de la pared. Sigue recto hasta encontrar un agujero oculto en el suelo. Déjate caer por él y a tus espaldas encontrarás la puerta que lleva a un demonio Gárgola de Titanita. Si das media vuelta y rodeas la zona circular verás una puerta. Entra y rompe la pared falsa de la izquierda. Déjate caer y llegarás al altar donde está el anillo de la luna oscura.
Para continuar avanzando, derrota al demonio Gárgola o ignóralo y sigue por el hueco de la pared. Llegarás a una cámara amplia llena de esqueletos rueda. Atráelos por separado para acabar con ellos (puedes ayudarte de las calaveras explosivas). A la izquierda de la sala está el camino que comunica con el herrero. Sólo él puede abrir el atajo, si llegas dejándote caer por el camino superior.