GUÍA DE LALIGA

No es una temporada más en el Atlético. Se cerró un ciclo, la vieja guardia se marchó y el Cholismo escribe las primeras líneas de un nuevo capítulo. Toca reinventarse. Ni Godín ni Juanfran ni Griezmann patronearán la nave y se buscan voluntarios para el paso al frente.

El club ha buscado en Portugal. Otra vez. Y, desde allí, llega un Joao Félix que despierta ilusión en el Atlético —no es para menos después de los 127 millones de desembolso— pero que plantea las lógicas dudas de un prospecto que con 19 años sale de casa para sentarse en el trono de uno que ya comía en la mesa de los más grandes. Simeone ha apuntalado su idea con Felipe y Herrera, llamados a mantener la dosis habitual de carácter del partido a partido. Lodi aterriza desde Brasil para aportar imaginación y profundidad al sector izquierdo y Llorente deberá hacer olvidar a un Rodrigo que, como Lucas, se apartó de la idea de un crecimiento en el Atlético.

Los objetivos, inmutables. De inicio y por presupuesto, el tercer puesto en el campeonato es innegociable, como el esfuerzo, y, a partir de ahí acortar las distancias. El Madrid se despistó la temporada pasada y el Atlético encadenó dos seguidas terminando por delante. La misión sigue siendo estar cerca de los dos gigantes, por si alguno o los dos hacen aguas.

La Champions, o más bien Turín, dejaron una herida abierta en el Atlético que sigue obsesionado con el título que le falta. La aspiración en la Copa la marcará el esfuerzo en la novedosa Supercopa. Será el momento de calibrar el nivel de la plantilla que tendrá el Atlético.

Acomete un reto diferente en el Atlético. Hace años llegó para reflotarlo y un par de temporadas atrás inició una renovación que en esta campaña tiene que ser una realidad. Los Giménez, Saúl, Oblak, Koke, Thomas… han ido creciendo al lado de los veteranos que ya no están. Versados en la idea, tienen ahora que impregnar al resto. Simeone ha ido moldeando a los reemplazos para alargar la propuesta y mantener el estilo. Se ha encontrado con dos reveses. Lucas y Rodrigo son dos contratiempos inesperados, en el guión estaba que serían protagonistas en mayúsculas y ni sus mejores palabras sirvieron para hacerles cambiar de idea. Pocas veces —más bien ninguna más— el técnico porfió para que siguiera un jugador y al final no lo consiguió.

Muchos se han ido y muchos han venido, pero el dueño de la portería, para respiro atlético, será el mismo. El esloveno ha sido el jugador más regular del equipo durante las dos últimas temporadas, encadena cuatro Zamoras y es más que una garantía de puntos para Simeone. El Atlético acometió una operación de renovación sin precedentes en la portería para asegurarse a una de las estrellas del fútbol mundial. Con Oblak bajo palos todo es más fácil.

No parece asustarle el reto. El joven aterriza para heredar una responsabilidad mayúscula, lejos del regazo del Benfica, club donde aún no había tenido esa cuota de obligaciones. Salir al campo sin que le pese el desembolso será el primer paso. La paciencia del entorno jugará un papel crucial para no coartar su talento. Es el antídoto contra la previsivilidad, la que suele aquejar al Atlético en la parte final de la temporada. Hasta entonces, tiene que haber calma para que su talento crezca. De momento, dejó muy buenas sensaciones y goles ante el Madrid, el combinado de la MLS y la Juventus.

"El Atlético ha fichado muy bien esta temporada, en estos momentos se puede permitir el lujo de fichar a cualquier jugador del mundo. Hay uno en especial que tiene muy buena pinta: Joao Félix. Jugué en esa posición, la mediapunta, muchos años, sé. Y he visto en el portugués movimientos que yo hacía. Ahora falta que sus compañeros se atrevan a buscarle cuando esté entre diez rivales: cuantos más haya a su alrededor, más tranquilo estará él. Que el compañero sepa que necesita esos balones entre líneas, ahí aparece el talento. Y eso que era un verano difícil, entre tantos adioses complicados. Los de Godín, Juanfran, Filipe. Pero son cosas del fútbol. Algún día tenía que ocurrir. Nos ha pasado a todos, que el tiempo nos alcanza, la fecha de caducidad. Pasará también con Messi y Cristiano Ronaldo. El Atlético ha sabido regenerarse con muy buenos fichajes, aunque al principio habrá que tener paciencia, hasta que dejen de ser nuevos y la plantilla sea de nuevo un grupo. Una cosa hay segura: el Atlético está donde está gracias a la labor de Miguel Ángel Gil Marín. Todo el mundo sabe que yo no soy una persona pelota, que no lo digo por cumplir sino que lo hago de corazón. Gracias a él el Atlético es un grande. Si Simeone le pide a Neymar que nadie dude que haría todo por ficharle. ¿Si este equipo me recuerda al nuestro del doblete en sensaciones, por no haber perdido ningún amistoso en verano? Es imposible comparar una cosa con otra. Los presupuesto son absolutamente diferentes, un abismo. Por ejemplo, yo llegué del Panionios de Grecia por 75 millones de pesetas, lo que ahora serían 750.000 euros. Nuestro equipo fue un milagro, un grupo de futbolistas humildes hecho gracia por Antic. El Atleti mira hacia delante y lo hace sin Griezmann. Fue un gran futbolista que dio mucho al equipo y al club pero se acabó y ahora hay que mirar sólo hacia delante, la 2019-20, con Joao Félix".
*Pantic jugó 107 partidos en el Atlético: de 1995 a 1998.

 

El Wanda Metropolitano sucedió al Vicente Calderón como hogar del Atlético de Madrid. La apertura del nuevo estadio, el 16 de septiembre de 2017, fue toda una revolución en el fútbol español por varios motivos. Entre ellos, su aspecto cosmopolita o por su capacidad para 67.829 espectadores.

Además, en su primer año acogió la final de la Copa del Rey entre el Sevilla y el Barcelona y, en su segundo, fue juez y testigo de la victoria del Liverpool ante el Tottenham en el partido decisivo de la Liga de Campeones. Ubicado en la Avenida de Luis Aragonés, en el distrito de San Blas-Canillejas, el Wanda nace para ver a 'su' Atlético hacer historia.

Joao Félix, partiendo desde la banda

El Atlético afronta un año con muchos cambios, principalmente en defensa, santo y seña de Simeone desde su llegada. Giménez queda como referente en el centro de la zaga sin Godín y busca acompañante entre Savic, el veterano en el método Cholo, Hermoso y Felipe para salvaguardar la meta de Oblak. En el lateral izquierdo ha llegado Lodi para suplir a Filipe y en el derecho Trippier competirá con Arias por la titularidad. En el centro del campo Simeone ha probado un 4-3-3 durante los entrenamientos de pretemporada, aunque puede continuar con su tradicional 4-4-2. La duda llega en la posición de Joao Félix, al que ha situado en la banda derecha la mayoría de los encuentros veraniegos, pero también como segundo punta, lugar aparentemente natural y en el que jugaba Griezmann. La competencia en el medio será feroz, con la llegada de Llorente y Herrera para pelear con Thomas, Saúl y Koke, donde estos dos últimos siempre han sido intocables para el técnico argentino. Entre esos cinco saldrán dos, tres o hasta cuatro titulares. Lemar y Vitolo quieren dar un paso adelante y demostrar por qué llegaron al club y Morata y Diego Costa serán los referentes ofensivos, pudiendo jugar juntos en una doble punta clásica o alternándose acompañados por Joao Félix.

El Atlético de Madrid no saldrá de la capital hasta mediados del próximo mes de septiembre. Y no será por jugar los tres primeros partidos en casa. Sí la jornada inaugural, contra el Getafe; aunque, en la segunda, su rival será el Leganés en Butarque. Antes del parón de selecciones, los de Simeone volverán al Wanda para medirse al Eibar. Rozó el pleno el equipo de Simeone en pretemporada, que no fue capaz de sobrepasar al Chivas. Entre pruebas y viajes, el triunfo 7-3 ante el Real Madrid se escribirá en los libros de historia. Balance: cinco victorias y un empate.