Vinicius, ese bien de valor incalculable del Madrid

Ni en sus mejores sueños el Madrid vislumbró que al cerrar el fichaje de Vinicius estaba comprando un Balón de Oro. Supuso un desembolso de 45 millones. Ahora tiene un valor de 180, tanto como Haaland, Mbappé y Bellingham. Vini fue el primero de una lista de jóvenes brasileños fichados (luego vinieron Rodrygo, Reinier y Endrick) con los que el club intentaba buscar tener al nuevo Neymar a un precio asequible. Florentino dio esa orden después de pelear con el Barça por Ney y tener que desistir porque el precio, como luego se demostró en los juzgados, se disparó hasta las nubes.

Pensar ahora que en la estrategia del Madrid está vender a Vinicius el próximo verano es un error. ¿Cómo dejar escapar a uno de los tres mejores futbolistas del planeta cuando lo tienes en tus filas? ¿Cuánto le costaría al Madrid fichar a un jugador de esas características? Seguro que tres o cuatro veces más de lo que pagó por él. Tan claro lo tiene Florentino que se negó a escuchar la superoferta que Arabia tenía preparada para fichar al ex de Flamengo.

Para fortuna de Ancelotti y del propio Madrid, Mbappé está encantado con la idea de jugar como delantero centro. Eso le acerca más al gol. Así que Vini sigue teniendo vía libre en la izquierda para alborotar el juego del equipo. Como hizo ante el Espanyol. Porque el brasileño agita al Madrid tanto dentro como fuera del campo. Lo hace con su juego, pero también con la lucha que ha decidido abanderar contra el racismo. Lo hace con la intensidad que pone en el césped, a veces mal llevada por sus protestas. O cuando provoca que Arabia quiera firmarle el contrato más alto de la historia del deporte. Vini es un bien de valor incalculable para el Madrid.

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