Ningún ‘pero’ al Madrid

Hay resacas que son muy buenas. Hay resacas que no te dejan la boca seca ni la cabeza ardiendo de dolor. Unas pocas horas después de la victoria del Madrid contra el Barça, resulta muy complicado escribir esta columna de opinión. Porque siempre es más fácil lamentarse, criticar al equipo, hacer una lista de lo que no funcionó, atacar en concreto a tal o tal jugador, dar consejos al entrenador para las próximas citas. En definitiva, es más placentero machacar que alabar. A estas horas tempranas de la mañana, con el cerebro fresco y el corazón tranquilo, soy incapaz de encontrar algo negativo en el lado madridista del Clásico. Seguro que me van a hablar de la actitud de Vinicius al ser sustituido demasiado temprano por Xabi Alonso. Pues a mí me parece muy bien que un técnico imponga su autoridad y me parece positivo que el delantero brasileño esté tan implicado en el partido que no quiera irse.

Otros me dirán que Arda Güler regaló un gol al Barça poniendo en peligro el resultado final. Pues a mí no me pareció un error por falta de nivel, sino la consecuencia de una voluntad de jugar al fútbol, de sacar limpiamente la pelota y de no esconderse. Güler quiso ser Modric en ese momento y un día lo será durante los 90 minutos. No le pongo ningún ‘pero’ a este Madrid de Xabi que, moralmente y futbolísticamente, abofeteó al Barça de Flick.

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