Media Liga decidida desde el VAR

Cerca de las 18:00 del domingo, Kessié llegó tarde para frenar una internada de Fran Pérez (hijo de Rufete) y le derribó golpeando su pierna de apoyo, cayéndose incluso encima del jugador valencianista en una acción ‘carne de VAR’. Alberola Rojas, árbitro manchego que dirigió desde el campo el partido, estaba oblicuo a la acción y pensó que Kessie había tocado primero la pelota. Por eso pitó córner, algo que nunca sucedió dado que el balón salió impulsado por Fran Pérez. Iturralde me aclaró por la tarde en El Carrusel que en este caso siempre debe avisar el VAR para que al menos el árbitro pueda decidir si es penalti o no, una vez contemplado que Kessié no toca el balón en ningún momento. Pero Jaime Latre, el hombre del VAR, no hizo nada ni reclamó la atención de Alberola, yéndose al limbo un penalti que podría haber dado un punto al Valencia, que a su vez podría valerle para salvarse en la jornada 38 y dos menos al Barça, que así salió indemne de un partido marcado por sus bajas de tronío. Las quejas de Baraja y de sus hombres no sirvieron para nada y aliviaron a un Barça abonado al ‘unocerismo’.

Mi sorpresa fue en aumento a las 22:30 horas cuando Carvalho, a 12 minutos del final del partido del Villamarín, derribó a Benzema dentro del área verdiblanca. Una zancadilla lateral clarísima, de esas que permiten al árbitro pitar el penalti de turno sin asustarse por la reacción de la grada. Pero Soto Grado, condicionado seguramente por las críticas que recibió por no sacar a Ceballos una amarilla en el derbi copero del Bernabéu, se arrugó o directamente no vio con claridad la acción, que puede ser. Lo sorprendente es que Medié Jiménez, el árbitro de VAR, tampoco reclamó la atención de Soto para que fuese a revisar la jugada en la pantalla de VAR. Para colmo, la producción de televisión solo puso una repetición rápida, algo inaudito porque cuando es una jugada polémica lo repiten mínimo entre cuatro y seis veces. Si no hay imagen, no hay alarma social. Si no hay alarma social, no hay penalti, no hay polémica.

No es la primera vez que pasa y la afición madridista empieza a estar cansada de este ninguneo que radica en parecer que los posibles errores a favor del Madrid son causa nacional de discordia en los foros futbolísticos (las redes sociales influyen mucho en este apartado) y a cambio si el Madrid es el perjudicado se le pone sordina y parece que los blancos no tiene legitimidad moral para quejarse del asunto arbitral. Y eso que estamos en plena resaca del escandaloso lío de Enríquez Negreira. De hecho, la afición madridista ya se manifestó antes del Clásico de Copa lanzando billetes de 500 euros con la cara de Laporta en los alrededores del Bernabéu. El caso es que si el VAR llega a intervenir en los partidos del Camp Nou y el Villamarín, posiblemente ahora el Madrid estaría a cinco puntos y no a nueve. Casi la mitad de la desventaja que acumula se ventiló en dos ‘no decisiones’ de VAR. Media Liga que puede volar en una tarde de domingo a solo dos semanas del Clásico decisivo del Camp Nou (día 19). Imposible evitar que el madridismo esté molesto y hastiado con todas las cuestiones relacionadas con el arbitraje en nuestro país. Curiosamente, en Europa el Madrid domina con grandeza y títulos. Y gana sin polémicas, mientras que el Barça no tiene hueco ni siquiera en la Europa League…