Más tiernos que el Día de la Madre

Si en un campo como Anfield no eres capaz de igualar el nivel físico que te proponen los ingleses desde que pisan el césped estás muerto de salida. Luego se podrán hacer un montón de tesis futboleras y sesudas sobre lo sucedido en el verde, pero si pierdes todos los duelos y das sensación de blando no tienes nada que hacer. Y el Madrid fue muy blando.

Sangrante fue la manera infantil de defender las jugadas defensivas a balón parado, con un Hujssein superado que perpetró un partido horrible. Por primera vez desde su fichaje el central dio la sensación de fragilidad y de estar superado por el nivel del choque. Antes del gol, el Liverpool había rematado varias veces de cabeza con una insultante sensación de superioridad. Tanta tablet y análisis para acabar emparejado a Vinicius con Van Dijk carece de sentido.

El Madrid tiene este año bastantes jugadores altos y con presencia, pero con una falta clara de agresividad en las pelotas divididas a balón parado. Ni son peligrosos en ataque ni contundentes en defensa. En el fútbol actual las jugadas de estrategia tienen una importancia capital, marcan muchas veces la diferencia y Xabi Alonso y su cuerpo técnico tienen que encontrar una solución a un problema evidente para el equipo desde que empezó la temporada. Entre otras cosas porque Courtois no va a ser eterno...

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