Jordania, un modesto que sueña con el Mundial 2026

Jordania nunca se ha clasificado para la fase final de un Mundial y es, por lo tanto, una de las muchas selecciones que esperan con ansia la ampliación del torneo a 48 equipos para tener más posibilidades de lograr una plaza. Hasta ahora, Asia ha contado con cuatro cupos directos y una repesca. Para 2026, tendrá el doble de billetes: ocho automáticos y otro opcional en función de un playoff. Se abrirá entonces una nueva perspectiva para una federación a la que hay que considerar de nivel medio en su propio continente y claramente modesta en el panorama global.

En el camino hacia Qatar, Jordania no logró alcanzar la última fase de clasificación de la zona asiática, a la que llegaron doce combinados nacionales. El hoy rival de España se quedó en la segunda ronda, una liguilla de cinco equipos. En ella ganó todos sus partidos contra Nepal y China Taipéi, empató los dos frente a Kuwait y perdió los dos ante Australia. Sus 14 puntos no fueron suficientes para avanzar a la siguiente etapa.

Sin embargo, en Brasil 2014 se quedó muy cerca de una milagrosa clasificación, acabando como el quinto mejor conjunto de Asia y llegando de esta manera hasta la repesca intercontinental. Tuvo la mala fortuna de que le tocó medirse a la Uruguay de Forlán, Luis Suárez, Cavani y Stuani, que la masacró en el partido de ida en Amán (0-5). En la vuelta en Montevideo, Jordania firmó un meritorio 0-0 que ya no tuvo ninguna trascendencia.

Se da la circunstancia de que el técnico que inició aquella exitosa fase de clasificación es el mismo que vuelve a dirigir ahora a la selección de Jordania, el iraquí Adnan Hamad. En aquella ocasión, fue extrañamente destituido pese a conseguir una tercera plaza que supuso un billete para la repesca asiática contra Uzbekistán, el paso previo a la eliminatoria decisiva frente a los charrúas. Se puede decir, pues, que él fue el gran arquitecto de aquella histórica campaña. Hamad también consiguió en 2011 una plaza en los cuartos de final de la Copa de Asia, algo que Jordania sólo había logrado una vez antes: en 2004. Esa clasificación entre los ocho mejores sigue siendo el resultado más positivo del país en la máxima competición de su continente.

El momento actual del equipo es muy bueno: ha ganado sus últimos cinco partidos sin encajar ningún gol. Dos han sido amistosos y los otros tres correspondían a la fase de clasificación para la Copa de Asia de 2023, que se disputará el próximo verano y para la que Jordania ha conseguido sacar un billete. Los rivales ante los que ha logrado estos excelentes resultados han sido Nepal, Indonesia, Kuwait, Siria y Omán. Entre la hinchada local hay una cierta excitación alrededor del joven delantero Ali Olwan, que ha marcado cuatro goles en los tres últimos partidos con el combinado nacional. Tiene 22 años, y tras destacar en el Al Jazeera de su país firmó este año por el Al Shamal catarí.

Lo más visto

Más noticias