El año de Turquía

La victoria del Galatasaray en Old Trafford es una de esas que entran directamente en la historia no sólo del club que la consigue, sino también de todo el fútbol de su país. Ese 2-3 ante el Manchester United viene a confirmar ya en la fase final lo que se insinuaba en las eliminatorias previas: está siendo una temporada extraordinaria para Turquía, que lidera ahora mismo con una diferencia notable el ránking de puntos de la UEFA basado en los resultados de sus equipos en la temporada 23-24. Es más que probable que, cuando avancen las competiciones, las grandes ligas acaben superándola, pero ya nadie le quitará a la federación turca una puntuación que la hará crecer ostensiblemente en el coeficiente general y, por lo tanto, en la lista de acceso a los torneos europeos de los próximos cursos.

Pero el Galata no está solo. El Fenerbahçe y el Besiktas -sobre todo el primero- están entre los favoritos a optar al título de la Conference League. Sólo cayó el Adana Demirspor -entrenado por Patrick Kluivert- y lo hizo tras superar dos rondas y perder en la tercera ante el Genk en la tanda de penaltis. Es un momento en el que vuelve a haber inversiones fuertes en el fútbol turco, que está atrayendo a jugadores importantes.

El resultado de Old Trafford reivindica también el carácter imprevisible de una competición en la que se nos ha contado demasiadas veces que los representantes de los campeonatos medianos y pequeños no pueden presentar batalla ante los gigantes. Turquía se levanta y recuerda a todos aquellos que planean cambiar el mapa del fútbol europeo que no pueden olvidarse de ellos: es un país apasionado por este juego y cuenta con clubes de una dimensión social que sorprendería a aquellos que la desconocen.

Y ojo: ese partidazo de Mánchester manda también un aviso a la millonaria Premier League. En lo que llevamos de curso (poquísimo), los equipos ingleses ya han perdido en los torneos europeos ante rivales de Turquía, Polonia, Grecia y un francés que está lejos de ser el PSG. Dos de ellos en su propia casa.

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