Toni Solà, nutricionista, sobre evitar engordar en Navidad: “Nos tratamos como espectadores del propio cuerpo”
Se estima que cada persona puede subir entre medio kilo y dos kilos durante la época navideña, que se convierten en un problema cuando no se pierden.
La Navidad es una época marcada por celebraciones, reuniones familiares y una presencia constante de comida en la mesa. Durante estas semanas se rompe la rutina habitual y es frecuente comer más, beber más alcohol y moverse menos. Todo ello hace que los excesos sean casi inevitables y que muchas personas noten cambios en su peso al terminar las fiestas.
En términos generales, se estima que la mayoría de las personas gana entre medio kilo y dos kilos durante el periodo navideño. Parte de ese aumento no es grasa corporal, sino retención de líquidos y mayor carga digestiva, especialmente por el consumo elevado de sal, alcohol y carbohidratos. Sin embargo, el verdadero problema aparece cuando ese peso no se pierde después y se convierte en una ganancia acumulativa que se repite año tras año.
De acuerdo con el nutricionista Toni Solà, conviene no dar por hecho este aumento de peso y tomar medidas desde el comienzo de las celebraciones: “Si arrancamos con la idea de que en Navidad se engorda sí o sí, nos tratamos como espectadores del propio cuerpo y no como protagonistas”, apunta. “La clave no está en un plato ni en un día concreto, sino en el patrón personal: movimiento diario, decisiones inteligentes en la mesa y descanso suficiente. Con ese marco, la Navidad deja de ser una amenaza y se convierte en un periodo especial que se gestiona con tranquilidad”, agrega.
La clave: moverse
Otro aspecto clave es mantenerse activo. No es necesario realizar entrenamientos intensos, pero caminar a diario, aprovechar actividades al aire libre o conservar una mínima rutina de ejercicio ayuda a contrarrestar los excesos. Dormir bien y manejar el estrés también influyen, ya que el cansancio favorece el picoteo y las elecciones menos saludables.
Noticias relacionadas
“Si ya estás activo, sé aún más en estas fechas; y si no lo eres, empieza ahora, no en enero”, explica el nutricionista, quien además opta por entrenamientos de fuerza: “Es un seguro metabólico: preserva la masa muscular, regula el apetito y mejora cómo gestiona el cuerpo lo que comemos”.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí