Mikael Ymer, numero 51 del mundo, castigado con 18 meses sin competir
La ITF ha castigado al tenista sueco por saltarse tres controles antidopaje. El tenista sueco defendió su inocencia en las redes sociales.
El mundo del tenis se ha despertado este martes con una noticia impactante: el anuncio de la suspensión de 18 meses sin competir del tenista sueco Mikael Ymer, actual número 51 del mundo del ranking ATP.
Ymer, de 24 años, ha sido castigado después de que la ITF le acusase de haberse saltado tres controles antidopaje fuera de la competición, lo que automáticamente supone una sanción similar a un positivo en dopaje. Sin embargo, pese a que Ymer fue absuelto en primera instancia por un tribunal independiente, la ITF apeló al TAS, que este lunes dio la razón a la Federación Internacional.
La noticia la ha dado a conocer el propio Ymer a través de sus redes sociales, en las que ha publicado un comunicado en el que, además de exponer los hechos, también defiende su inocencia, asegurando que no ha cometido la tercera infracción de la que se le acusa. Este es el comunicado íntegro de Ymer.
“En enero de 2022, la ITF me acusó de una potencial violación de la normativa antidopaje por haberme saltado tres controles antidopaje fuera de competición en un periodo de 12 meses. Peleé estas acusaciones en un juicio y fui absuelto pot un tribuna independiente de tres jueces en junio de 2022. La ITF apeló la decisión argumentando que los tres árbitros que me exoneraron lo hicieron bajo sus propias reglas, y pidieron al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) que alcanzase una decisión diferente sobre los mismos hechos de los que ya había sido absuelto. Ayer me enteré que el Tribuna de Arbitraje Deportivo me ha suspendido con competir en el tenis profesional durante 18 meses perse a que nunca he usado y nunca he sido acusado de usar sustancias prohibidas. Después de haber sido absuelto una vez y profundamente convencido de no siento que cometiera era tercera infración, encuento injusta la decisión de intentar encontrarme culpable. Ademñas, es difícil comprender que me hayan impuesto un castigo de 18 meses.
Entiendo que esas reglas se han establacido para proteger la integridad de nuestro deporte, y que están ahí por una razón. Sin embargo, no creo que rompiera las reglas y mi conciencia está limpia con Dios como testigo”.