TENIS

Auger-Aliassime, el extraño caso del pupilo de Toni Nadal

El canadiense, número 8 del mundo, ganó el ATP de Róterdam en febrero y desde ahí ha caído en primeras rondas de muchos torneos.

CJ GUNTHEREFE

El pupilo de Toni Nadal, Félix Auger-Aliassime (22 años), lleva un 2022 algo irregular. El número 8 del mundo de la ATP se esperaba una explosión, como la de Carlos Alcaraz, y al principio de año así lo demostró, pero después de febrero se ha mostrado inestable en la pista, tanto que este miércoles volvió a caer a primeras de cambios en el US Open.

En los primeros torneos del año, como el Open de Australia, consiguió llegar a cuartos de final frente a Medvedev, y aunque perdió, estuvo a punto de derrocar al número 1 actual. Ganó los dos primeros sets, pero luego le faltó ese golpe final, para cerrar el partido. Luego llegaría el ATP 500 de Róterdam (Países Bajos) y ahí sí lo consiguió, se llevó su primer título ATP con 21 años, que tenía en ese momento, eliminando a gente como Andy Murray, Andrey Rublev y en la final a Tsitsipas, lo que se podía prever que el canadiense podía optar este año a algún título más. Se podía soñar a lo grande.

El tenista canadiense Felix Auger-Aliassime posa con sus entrenadoras Frederic Fontang y Toni Nadal antes del Masters 1.000 de Montecarlo 2021.

Aunque, después de la victoria del pupilo de Toni Nadal, el canadiense empezó a ser un jugador irregular en los torneos. Se le vio bien en Marsella, pero después cuatro veces segundas en las primeras rondas en: Indian Wells, Miami, Marrakech y Monte Carlo. Luego volvió de nuevo al juego del principio de año, donde en cuatro torneos: Estoril, Barcelona, Madrid y Roma se quedó en cuartos de final, la cual parece un poco su maldición porque muchas veces no ha podido pasar de esa ronda. Y en Roland Garros le frenó Rafa Nadal, aunque pudo ganarle y le dio mucha guerra en su torneo fetiche.

Volvió a Países Bajos, a la ciudad de Hertogenbosch, lo que era un reencuentro donde ganó su primer torneo. Llegaría a semifinales, pero después volvió a su maldición de caer en las primeras rondas y cuartos de finales. En tres torneos se quedó en cuartos, Halle, Cincinnati y Montreal, en Los Cabos fue su única excepción que llegó a semifinales, y en Newport se quedó fuera en su primer partido.

Tampoco ha tenido suerte en los Grand Slam, tanto en Wimbledon y el US Open, se ha marchado a casa a las primeras de cambio. Esta irregularidad le ha llevado a no estar en el equipo de la Copa Davis de Canadá, aunque aún le queda muchos años de juego al tenista canadiense, aunque fue justo después del verano pasado, cuando mostró su gran calidad de juego.

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