Verstappen es el mejor
Max Verstappen ha conquistado el Mundial de Fórmula 1 porque ha sido el mejor de la temporada, y porque es el mejor piloto actual de la parrilla. Tal cual. Alguien puede añadir el factor del coche, claro. En la F1, siempre es un factor. Pero este año no ha sido tan determinante como en sus títulos de 2022 y 2023, cuando arrasó con un 77% de victorias. La presente edición la comenzó con una voracidad parecida: ganó siete de las diez primeras carreras, sin contar los esprints. Pero a partir de entonces, su monoplaza se apagó, a la par que se encendieron los de sus rivales. Sobre todo, McLaren, pero también Ferrari y Mercedes. En ese punto de inflexión, Max tuvo que demostrar por qué también es el mejor con menos coche.
Muchas veces utilizando su pericia y su inteligencia al volante, aunque la mayoría de ellas tirando de su agresividad marca de la casa, mantuvo el pulso con sus oponentes, en especial con Lando Norris, que es quien más le ha apretado en la clasificación. Otra vez un inglés, como en su primera corona. Si Mad Max fue capaz de no perderle la cara en 2021 a uno de los más ilustres de la historia, Lewis Hamilton, a quien batió en la última vuelta del Campeonato después de varios duelos al límite del reglamento por ambas partes, estaba claro que esta vez no se iba a amilanar ante Lando. De paso, por si quedaba alguna duda, Verstappen sacó lo mejor de sí para lograr un triunfo a lo campeón en Brasil. Fue la sentencia.
En Las Vegas le ha bastado acabar quinto para atar su cuarto título mundial, en una zona de puntuación lejana a la que está habituado, pero que ha visitado bastante en la segunda mitad de la campaña, con un cuarto puesto, cuatro quintos, tres sextos… Es lo que tocaba. El tetracampeonato le sitúa ahora en el escalafón histórico a la altura de Alain Prost y Sebastian Vettel, y solo por detrás de Michael Schumacher, Lewis Hamilton y Juan Manuel Fangio. Un grande muy grande.