Un récord que romper
Mis hijos, de 19 y 21 años, han sido fijos en La Cerámica casi desde que nacieron. Ambos tienen la suerte de poseer un álbum de recuerdos amarillos en Primera, en Europa y hasta levantando un título. Creo que los dos han visto como su Villarreal ha ganado a todos los rivales que han pasado por el remodelado estadio, aunque no creo que tengan un recuerdo claro y nítido de la última vez que vieron al Submarino ganarle al Fútbol Club Barcelona.
Cuando aquella victoria se produjo, tenían tres y cinco años, así que con todo lo vivido después, sus recuerdos serán difusos. Y es que el Villarreal suma la friolera de 16 años sin ganarle a los blaugranas como local. 16 años… que se dice pronto. Es verdad que aquella fue una victoria sonada, un 3-1, con Cazorla en plan estelar. Pero a partir de ahí, la tiranía de Messi, los goles de Suárez en el descuento o la mano de Piqué han ido aumentando un registro que ya es de récord.
Hoy, con Quique Setién en el banquillo local de La Cerámica, puede haber revancha. El técnico cántabro asegura que tener al Barcelona delante no le altera (ni tan siquiera por su pasado culé) y puede que a los jugadores ese tipo de historias estadísticas tampoco les tengan muy preocupados. A fin de cuenta ninguno lleva 16 años esperando ganarle al Barcelona. Pero para el club y su afición sí hay ganas de intentar ponerle fin a un registro tan negativo como este.