Un jugador colgado de un asterisco

Incógnitas. Lo último que hemos sabido de Dani Olmo es que el CSD da crédito a la versión del Barça, que considera que envió la documentación a tiempo a LaLiga. Para quienes tuvieron que seguir las últimas horas de este caso al minuto, hubo algunas cosas extrañas ese 31 de diciembre. Se filtró una moratoria de tres días de LaLiga al Barça en Mundo Deportivo que luego desapareció de la web; y luego, con la gente sentada en la mesa para comerse las uvas, llegó esa petición urgente del Barça a la RFEF para renovar las licencias (e-mail recibido a las 20:17) de los jugadores; y el comunicado de LaLiga (e-mail recibido a las 21:14) anunciando que el Barça no había presentado “ninguna alternativa que, atendiendo al cumplimiento de la normativa de control económico”, le permitiese inscribir ningún jugador a partir del 2 de enero. LaLiga, además, se dio prisa en borrar de su web a Dani Olmo y Pau Víctor, que habían desaparecido de la plantilla el 1 de enero a primera hora de la mañana. El día 4, sin embargo, LaLiga y la RFEF coordinaron un comunicado en el que resolvían ampliar el límite de coste de la plantilla del Barça pero también dejaban claro que, en virtud “de una interpretación literal de los artículos 130.2 y 141.5 del reglamento de la RFEF”, no concedían el visado a los jugadores. Es decir, el Barça podía fichar según la regla 1:1 pero no reinscribir a dos jugadores con contrato en vigor.

Perjudicado. Laporta dijo anoche en Yeda que esta situación “se podía haber evitado”. El primero, él, que no fue capaz de llegar puntual ni a la entrega de obsequios con el Athletic el miércoles (programada para las 21:15 local, apareció casi a las 21:40). Un escapista que vive al borde del abismo y que aún no ha explicado a sus socios con qué empresas ha activado la famosa palanca de los palcos VIP. De momento, le ha salvado una medida de gracia, pero le ha hecho un flaco favor a la entidad a la que asegura querer tanto; y que ahora será recibida en muchos campos como un club favorecido. Y, sobre todo, ha dañado a Dani Olmo, que va a tener que jugar señalado y con el asterisco de la provisionalidad colgado de la espalda, como si él hubiese hecho algo en todo esto. Pero también es justo preguntarse por esa pasión a la “interpretación literal”. No tenía lógica que el Barça pudiese fichar a un jugador por 40 millones, y no inscribir a dos suyos. Las normas son las normas, pero esos artículos no estaban hechos para eso. A una sociedad siempre le va mejor con sentido común. Y con transparencia. Aquí no nos han explicado todo.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.