Que nadie dé al Atlético por muerto
Los aficionados del Atlético se merecen vivir una nueva final de Copa. Han pasado ya muchos años desde la última, la que el equipo venció en el Santiago Bernabéu al Real Madrid. Mucho tiempo desde ese 17 de mayo de 2013 y ya es hora de que la hinchada disfrute de otra final. El 0-1 de la ida hace que la eliminatoria ante el Athletic esté complicada, pero el Atlético es capaz de darle la vuelta a la situación. Cada club tiene sus particularidades y en el rojiblanco lo fácil ha resultado siempre complicado y lo que parecía imposible no lo fue tanto. El Atlético ya sabe lo que es ganarle al Athletic en partidos coperos importantes, como en la final del 85.
Recuerdo que era un equipo lleno de canteranos, de futbolistas de la casa. Y con dos extranjeros de nivel. Votava se ganó poco a poco el cariño de la gente y terminó cumpliendo. Y el Atlético contaba en punta con Hugo Sánchez, el gran goleador mexicano. Lástima que se fuera de la manera que se fue. Aquella noche hizo dos goles. Los que entonces éramos chavales veíamos con mucho agrado a los Mejías, Arteche, Marina, Landáburu, Quique Ramos, Rubio… Y en el banquillo, Luis Aragonés. Un equipo muy querido. La situación ahora es diferente, el Atlético ha adquirido una dimensión que antes no tenía, aunque en el banquillo hay otro histórico como Simeone y también gente de la cantera como Koke, Saúl, Barrios y futbolistas a los que la hinchada aprecia mucho como Llorente, Correa y Morata. Una cosa está clara: hay eliminatoria. Que nadie dé al Atlético por muerto.