Nos queda Benzema para rato
Es una gozada comprobar cómo la ausencia del mejor jugador del Mundo y próximo Balón de Oro, Karim Benzema, no penaliza al equipo. Lo normal es que su lesión en Glasgow hubiese provocado un bloqueo en el juego de ataque, en el que el mago francés es determinante no solo por sus goles (44 en 46 partidos la temporada pasada) sino por lo que genera. Sin embargo, los jóvenes han tomado la bandera de la revolución y entre Rodrygo, Vinicius y Valverde han solventado el problema viendo puerta con mucha facilidad. El equipo se ha puesto las pilas y hasta Asensio ha aportado su granito de arena en forma de gol.
Pero que nadie se vuelva loco. Benzema es único e irrepetible y resulta mezquino querer adelantar su retiro cuando sus últimas apariciones se cuentan por éxitos relacionados con su talento y su compromiso. En Cornellà metió dos golazos en una tarde que se estaba torciendo. El capitán del Real Madrid no ha dicho su última palabra y cuando reciba el 17 de octubre en París su primer Balón de Oro seguirá demostrando que nadie le ha regalado nada. En diciembre cumplirá 35 años, pero su cuerpo y su mente están rejuvenecidos por la ilusión de seguir siendo un referente en el juego del equipo con el que se unió en matrimonio deportivo en el verano de 2009. Aun queda Karim para rato. No tengan prisa en prejubilarle...