Modric, continuidad prioritaria
Me llegan continuos mensajes de madridistas inquietos con el futuro de Modric. “Tomás, dime que seguirá un año más con nosotros”. Yo les tranquilizo rápido porque conozco la voluntad del croata: “Él se siente con fuerzas, fútbol y energía para seguir disfrutando con las conquistas del Madrid. Sigue con hambre. Le ofrecen mucho dinero, pero eso para él no es prioritario en la vida”. Así es Luka, nuestro Luka. Cierto que el emergente fútbol árabe, con sus generosos petrodólares, ha llamado a su puerta ofreciéndole cantidades a las que jamás podría llegar el Madrid, su Madrid. Pero el croata jamás ha especulado con eso. Su deseo siempre ha sido continuar un año más de blanco, disfrutar con el nuevo Bernabéu y seguir luchando por nuevos retos y objetivos. Luka todavía es de los pocos que no habla con nadie y se encierra dolido cuando el equipo sufre un tropiezo. Sigue viviendo el fútbol con la ilusión de un novillero pese a haber salido mil veces por la Puerta Grande...
Modric se siente útil y Ancelotti piensa como él. Para el italiano es un jugador clave en sus esquemas y ya planifica la próxima temporada contando con el genio de Zadar en su plantilla. Luka solo se iría en junio si el club le dijese que no cuenta con él, algo que no va a suceder bajo ningún concepto.
El final de curso del 10 del Madrid puede ser espectacular, estando a solo tres partidos de dos títulos más en su esplendoroso palmarés. Y le queda el postre de la Nations League, con Croacia, en junio. Los árabes que no tengan tanta prisa y esperen un poquito. Modric debe seguir aquí hasta 2024 y despedirse con todo el Bernabéu en pie.