Homenaje a Cristiano en el Bernabéu

Han pasado casi siete años desde que anunciaste, con una nota que me dejó helado y entristecido, tu marcha del Real Madrid. Yo, como tantos enamorados de este club inmortal, soñé muchas veces con verte retirado con esta camiseta, que tanto honraste, hasta que hubieses cumplido los 40 años (los cumples mañana, felicidades crack). Tus “siiiiiiiiiiuuuus” en esas celebraciones irrepetibles, tus golazos silenciando el Camp Nou y el Calderón, tu orgullo competitivo sin límites, tu capacidad para glorificar con tu esfuerzo y compromiso el escudo que dignificaste durante nueve años que jamás olvidaremos... A estas alturas no voy a perder ni un segundo en darle vueltas a tu marcha, por dolorosa que fuera. En mi corazón y en el de millones de madridistas tú sigues siendo uno de esos templarios que defiende la religión blanca allá por donde va. Muchos niños siguen comprando tu camiseta del Real Madrid. Tus 450 goles resuenan aún en el Bernabéu...

Por eso me encantó verte con mi colega Edu Aguirre, un amigo tuyo de los de verdad, de los que se cuentan con una mano. Siempre le he dicho a Edu que me da envidia sana. Esa entrevista que te ha hecho la he soñado mil veces. Pero la he disfrutado como si estuviera en su piel porque Edu te admira, te valora y te respeta como siempre hemos hecho los madridistas que seguimos suspirando por ti. El Bernabéu te espera. Te debemos una despedida colosal. ¡Homenaje, ya!