Hasta Cruyff lo hubiese hecho

Como no creo que sea nunca entrenador del Barcelona, me permitiré el privilegio de tener a mi disposición esta columna de AS para gritarle a Koundé a la oreja antes de salir a jugar esta noche como si realmente fuese Hansi Flick: ¡Hasta Cruyff hubiese mandado ese balón a la grada! Así, con signos de admiración incluidos, para que le quedase bien claro lo de Balaídos. Ya me he desahogado, vamos con lo de hoy. Y lo de hoy es evitar esa desganada suficiencia que a veces le entra al Barça cuando cree que lo tiene todo atado, como contra el Celta y la Real Sociedad, que hemos echado por la borda la ventaja sobre el Real Madrid porque nos sobran los títulos de Liga.

Nuestro rival europeo es una suerte de Girona a la francesa. El Brest, aislado en una esquina de Francia, en su Bretaña, no conoce la derrota en la actual Champions. Un empate y tres victorias. Nos supera pues por un punto. Es de esperar que el Barcelona por tanto no se relaje esta noche en Montjuïc, eso a lo que es tan dado, y que sume la cuarta victoria consecutiva para superar a los franceses en la clasificación y asentarse en la zona de privilegio que conduce a los cruces directos sin jugárselo en una eliminatoria previa. Veremos qué pasa finalmente, pero si nos vuelve a pasar algo parecido a lo del pasado sábado contra el Celta en Vigo, Jules: ¡Hasta Cruyff hubiese mandado ese balón a la grada!

Lo más visto

Más noticias