Habituados a las gestas en el Bernabéu

Arrasate no firmaba el empate antes de viajar al Bernabéu. Claro que si le hubieran dicho que iban a recibir un gol con posible fuera de juego por medio, les iban a pitar un penalti en contra e iban a jugar el tramo final con uno menos, posiblemente lo había ratificado con sangre,. Es lo que ocurrió en el partido de ayer. Vinicius marcó con Rudiger y Benzema en fuera de juego posicional, en la trayectoria de la pelota, cerca de Herrera. Su situación condicionó la posición del portero. Un gran Kike García conseguía el empate. Parecía que los rojillos podían lograr algo más, pero con la expulsión de David García con roja directa, la cosa se complicaba. Herrera y Benzema, encargado de lanzar el penalti, se volvían a ver las cosas.

Tal vez al francés se le pasó por la cabeza en esos instantes que Sergio le había adivinado dos penas máximas en El Sadar la pasada temporada. El caso es que su tiro pegó en el larguero. Osasuna tiró de casta y de trabajo para aguantar el valioso punto hasta el final y arañar otro empate en uno de los grandes escenarios mundiales. Van dos seguidos en años consecutivos. Los rojillos lograron destronar a los blancos, que venían de sumar todo lo posible. El campo fetiche, donde más goles ha marcado como visitante: 31. Osasuna es sexto en la clasificación, está a gusto en plaza europea. Soñar no está prohibido en Pamplona esta temporada. Y menos con estas gestas.