Griezmann, no hay mejor perdón que tu actitud en favor del equipo
No hay mejor mensaje para el Cholo y su credibilidad en el vestuario que ver a Griezmann dignificar una profesión como es la de futbolista. Siempre que lo veo, pienso que nació para jugar con el técnico argentino. Ambos son creyentes del lema ‘el esfuerzo no se negocia’. Ver a un campeón del mundo desvivirse independientemente del tiempo que le saquen del banquillo, sean 10 o 99 minutos, es una asignatura para repasar para los chavales del Cerro del Espino. Antoine, no hay mejor perdón que tu actitud y tu compromiso en favor del equipo. Tenía ganas de escribir un artículo ponderando su influencia y determinación en un partidazo, es algo que debemos de exigirle. El francés ha perdido con los años algo de velocidad y chispa, pero lo suple con su maravillosa lectura del juego, su facilidad para definir y una forma de perfilarse que facilita la continuidad en el juego ofensivo del Atlético.
En San Mamés, ante un Athletic en auge y descansado sin Champions, Antoine fue una pieza clave para que los atléticos realizasen el partido más completo de la temporada. A ello habría que sumar las acertadas decisiones del Cholito: elegir zonas de presión alta y baja, la inclusión de Kondogbia y Morata y volver a la línea de cuatro (la que más me gusta) fueron movimientos vitales para que el equipo demostrase un equilibro defensivo y de agresividad arriba que nos hicieron ilusionarnos con despegar de una vez.
Algo que, por cierto, provoca Reinildo desde que llegó. El mozambiqueño, esta vez, ante uno de los jugadores más desequilibrantes de la Liga, Nico Williams, desplegó de nuevo el catálogo del buen defensa. Su actuación en la Catedral dejó bien a las claras cómo defender puede convertirse en un arte. Si algún partido es para olvidar, el de Bilbao es para repasar. El Atlético demostró ante el Brujas y el Athletic que está capacitado para ser más cholista que el Cholo. Y si tienen alguna duda, que le pregunten a Griezmann y Reinildo…
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