¿Estamos aburridos de Messi?

Otro más. Messi ganará este lunes su octavo Balón de Oro y hay gente que se lo toma a guasa. Consideran algunos que al argentino los premios se le conceden por decreto. Guardiola dijo que debería haber uno para él y otro para el resto. Buen cumplido, sobre todo porque Haaland, jugador suyo, entra en la ecuación como perjudicado, pero la realidad es que Leo fue el mejor cuando tuvo que serlo: en Qatar, en el Mundial, en ese momento en el que rompió la historia y dejó para siempre atrás al resto de leyendas.

El 10. France Football fue muy claro al detallar antes de aquel torneo que el Mundial sería determinante a la hora de valorar esta edición de su premio. Pues bien, apunten: Messi fue campeón, mejor jugador, anotó siete goles, marcó en octavos, en cuartos, en semifinales e hizo dos tantos más en la final. La suerte le sonrío en los penaltis de Lusail ante Mbappé, lo que desequilibró hacia su lado el Balón de Oro. Nadie dudaría si Francia fuese campeona del mundo que el galardón debería ser para Kylian; sí se duda, en cambio, con Messi. Será por aburrimiento, imagino.

Olvidado. ¿Y Rodri? El jugador más importante de Europa y del mundo, el que más necesita Guardiola y el que ha hecho que el City por fin sea campeón de Europa, y España tenga otro título en sus vitrinas. Mañana hay derbi de Mánchester y ese es su sitio. Futbolista de césped, no de galas. Injusto, sí.

Luz en París. Sigue siendo este un PSG under construction, pero se atisban ya mejorías. Las cómodas victorias en Champions ante Dortmund y Milan lo demuestran. Luis Enrique está sabiendo rodear a Mbappé. Van claramente a más fichajes como Lucas, Skriniar, Kolo Muani, Gonçalo Ramos, Dembélé y Kang In Lee. La figura de otro de ellos, Ugarte, lo equilibra todo. Hasta Fabián es el Fabián que tanto reclamaban en París. Aún con patinazos sonoros como el de Newcastle, parece que el PSG está creando algo importante. Cuidado.

Hoy descubrimos a… Facundo Rodríguez (2000). Se juega esta noche la final de la Copa Sudamericana entre Fortaleza de Brasil y Liga de Quito de Ecuador. Los ecuatorianos, con internacionales contrastados como Alexander Domínguez, Jhojan Julio, Alexander Alvarado o el peruano Paolo Guerrero son favoritos. También por la fiablidad de su pareja de centrales (Rodríguez-Adé). El primero, argentino, fichado de la segunda división de su país, ha sorprendido. Alto, seguro, fiable.

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