Entrenador Pep, presidente Guardiola
Mala racha. No será en esta columna en la que encuentren críticas ventajistas a Guardiola en un momento tan duro como brillantes fueron la mayoría en su carrera. Una victoria en diez partidos, en cualquier caso, extraña. Al primero, al propio Pep, que ayer dijo, medio en broma, medio en serio, que las derrotas le quitan el sueño y le cortan la digestión. No extrañaría esto en absoluto conociendo al personaje. Ojalá todos nos tomáramos nuestros trabajos con el mismo grado de profesionalidad y perfeccionismo que él.
Indicios. Tal ha sido el éxito de Guardiola que cualquier relato alejado del suyo, del que siente que ha construido y alimentado, es inesperado. Por eso jamás pensó que el City, su City, podría caerse como lo está haciendo de manera estrepitosa. Hubo señales, es cierto, como cuando Rodrigo fue sancionado el curso pasado y vinieron tres derrotas; o como la final de la FA Cup perdida ante un United en ruinas. Quizá debió intuirlo. Quizá vender a Julián Alvarez no era conveniente. Quizá hacer más fichajes es lo que correspondía este verano.
El jefe. Pero el genio es él y a los genios se les da libertad. En cualquier caso, la sensación es que, pasados los años, la implicación de Guardiola es casi mayor con el City como institución que con el City como grupo de jugadores. Renovó cuando nadie lo esperaba y es la cara visible del club cuando hay que dar explicaciones sobre los 115 cargos sobre supuesto incumplimiento del fair play financiero que sobrevuelan sus cabezas. Ayer mismo salió el balance de cuentas de la temporada pasada y los números son verdes, algo que también obsesiona a Pep. Hasta ha dicho que no dirigirá a otro club después del City. Se le está poniendo cara de presidente. La gran duda: ¿presidente, dónde?
Mundial. Han sido días intensos de sorteos FIFA y concesiones de Mundiales. Queda todo estructurado y otorgado salvo el Mundial de Clubes de 2029. Debería ser para España, Marruecos y Portugal, pues se considera una preparación del Mundial de selecciones. ¿O no? Al parecer hay otros planes circulando y nos perjudican. Veremos.
Hoy descubrimos….Tommaso Martinelli (2006). Hay que darse una vuelta por Florencia este año porque el conjunto viola de Paladino está volando. En la Conference apabulló en el último encuentro y además hizo debutar en Europa a este joven portero de 1,96 de estatura y llamado a grandes cosas en Italia y en la Azzurra. Para muchos, el nuevo Donnarumma. Ojo.
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