Apagón general

Sin gol.- Si nos llegan a decir antes del partido que el Rayo de Francisco no iba a disparar una sola vez entre los tres palos de Kepa hubiéramos dado por hecho que el hasta ahora líder habría amarrado los tres puntos. Pues va a ser que no. En ataque el Madrid sufrió un apagón general, que se reflejó en una falta de claridad en la llegada al área rayista que resultó desesperante. Tiró a gol 22 veces, aunque sólo cinco a puerta. Baja definición ante un Rayo bien ordenado en torno a Dimitrievski, que tampoco tuvo que hacer el partido de su vida para salir indemne. Todo pudo cambiar en el único error defensivo de la Franja, con una pérdida de Unai que aprovechó Valverde para plantarse ante el gigante macedonio para fusilarle como si fuese un penalti. Pero Dimitrievski la despejó con reflejos y desde ahí todo se hizo muy de noche. Sacó otra pelota a Joselu en un gran remate y ya no hubo mucho más. Ataques empecinados, pero sin luces. No era el día. Y Vini no fue Vini...

El susto de Jude.- Y la cosa pudo ser peor todavía. Cuando Bellingham necesitó ayuda médica para revisar su hombro izquierdo se hizo un silencio terrible en el Bernabéu. Una lesión del inglés ahora sería un jarro de agua helada. Cuando Jude no marca, las porterías rivales se convierten en cajas de cerillas. Hay que mirárselo.

El Rayito.- Un club especial y una filosofía de barrio que lo convierte en un equipo diferente a todos, que cumplirá 100 años el próximo 29 de mayo. Muchos madridistas lucieron la Franja en su momento (Goyo Benito, José Luis Peinado, Chato González, Iznata, Toni Grande, Ortega, Lopetegui, Hugo Sánchez, Elvir Baljic, Negredo, Raúl Bravo, Diego Llorente, Luca Zidane o los actuales De Frutos y RdT). Y no olvido que en la secretaría técnica están Javi Portillo (más de 700 goles en la vieja Ciudad Deportiva) y David Cobeño (porterazo). Cada año fichan mejor. Y ahí están coqueteando con la zona europea de la tabla. Esta gente tiene mucho mérito.

Números mágicos.- El 5 de noviembre de 1994, un tal Raúl González jugaba su primer partido de blanco en el Bernabéu. Pese a sus 17 años, lo bordó con un partido que destrozó al Atleti entrenado por mi amigo D’Alessandro. Metió un golazo a la escuadra de Diego tras una asistencia de ese mago llamado Michael Laudrup. El Madrid ganó con brillantez ese derbi (4-2). Han pasado 29 años, una cifra especial para Raúl porque debutó en La Romareda de Zaragoza un 29 de octubre. Como especial fue hoy su Castilla, que le metió una manita al Atlético Baleares, con un doblete estelar de Gonzalo. Ojo a ese niño. Y lleva el 17, el primer dorsal que lució Raúl en su primer curso en la academia del Bernabéu. Ojalá le veamos pronto en el primer equipo. Sangre joven al poder.

Marcelo canta los 30.- Era un fin de semana feliz para los madridistas (triunfó el Castilla, el equipo femenino en Eibar y el de baloncesto en Granada) y no olvido que el sábado se unió a la fiesta blanca el legendario Marcelo. Nuestro 12 eterno consiguió que todos los vikingos fuésemos del Fluminense por un día, con esa taquicárdica final de las Copa Libertadores (la Champions de Sudamérica). Marcelo acabó levantando el trofeo, con esa escuela triunfal que mamó en el Madrid durante 16 exitosos años. Ya suma 30 títulos, más que merecidos. Obrigado por todo, crack.

El Clásico.- Lo que más duele de todo es que el tesoro alcanzado tras el Clásico (cuatro puntos de ventaja sobre el Barça) se fue la mitad al garete en siete días por la falta de puntería. El madridismo vio un equipo que dominó por completo y firme atrás, pero empatar con el Rayo en el Bernabéu no era el plan...

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