La siembra de Diego Martínez
El nuevo entrenador toma las riendas del Espanyol en un inicio de pretemporada con dos fichajes, diez salidas y todavía media plantilla, partiendo de la portería, por resolver.
La revolución en la dirección general, el cambio de banquillo y dirección deportiva, el continuo goteo de salidas y los dos fichajes ya anunciados. Incluso la campaña de abonados y las nuevas camisetas. Todo empieza a cobrar sentido este lunes, cuando los primeros jugadores del Espanyol se citen a las 8:00 horas en la mutua para superar las pruebas médicas y físicas, como pistoletazo de salida de la temporada 2022-23. Que no será una más. La plantilla está sufriendo una severa reestructuración. Y su líder también se estrena.
Tras su año “sembrático”, como a él le gusta llamar ese intervalo entre que dejó su histórica etapa en el Granada y el momento en que aceptó la propuesta del Espanyol, Diego Martínez toma las riendas de un Espanyol que ya ha experimentado más de una docena de movimientos y en el que, sin embargo, todavía queda mucho por hacer.
Se han marchado, tras finalizar su contratos, Diego López, David López, Dídac VIlà, Oier Olazabal, Óscar Melendo y Fran Mérida. Algunas salidas de un altísimo calado sentimental. Se fueron, pues estaban cedidos, Loren Morón, Manu Morlanes y Yangel Herrera. Regresan precisamente de sus préstamos Pol Lozano, Matías Vargas y Álvaro Vadillo. Y se vuelve a ir en formato de cesión con opción de compra Víctor Gómez (al Sporting Braga). En suspense queda Tonny Vilhena, a quien la FIFA ha dejado libre por pertenecer al Krasnodar, un club ruso.
Confirmados, y presentados, se encuentran los fichajes de Joselu Mato, que viene de anotar 14 goles la pasada campaña con el Alavés pero que se propone incluso superar esa cifra, y el de Brian Oliván, del Mallorca, que como el delantero llega libre tras acabar contrato. Y, aunque quedan más demarcaciones a reforzar, se necesita con urgencia un portero, con Bartlomiej Dragowski, de la Fiorentina, como el mejor situado en las quinielas pese a que la prioridad inicialmente venía siendo Álvaro Fernández, del Huesca.
Pero el Espanyol, más allá de la meta, deberá estar preparado para reaccionar en este mercado. Raúl de Tomás es indudablemente el nombre propio, el goleador en el escaparate, la eventual venta multimillonaria que arregle los balances de cuentas y aclare el camino a la compañía de Chen Yansheng, presidente y propietario, tras dos ejercicios consecutivos de pérdidas. Pero también Adrià Pedrosa y Sergi Darder están en la palestra, por haber entrado en su último año de contrato sin haber todavía renovado. El de Artà debe a priori ser la brújula en el campo de este Espanyol.
Se dividirá esta pretemporada del Espanyol en tres fases bastante marcadas, que empezarán ahora con dos semanas de intenso trabajo en la Ciudad Deportiva Dani Jarque, convertida en un centro de alto rendimiento, que culminarán el sábado 16 con el amistoso inaugural, ante el Montpellier (18:30). Después, y durante 11 días, perfilará Diego Martínez sus ideas en Marbella, el lugar donde los pericos acudirán por tercera temporada consecutiva y donde jugarán tres o cuatro partidos, entre ellos uno aún no oficializado ante Las Palmas.
De Andalucía viajará directamente a Inglaterra la expedición blanquiazul, que el sábado 30 a las 16:00 (hora peninsular española) visitará al Brighton Hove & Albion, noveno clasificado en la Premier League. Y quedarán otras dos semanas en Sant Adrià para acabar de preparar con algún otro amistoso el debut en LaLiga, que llegará el sábado 13 de agosto (17:00) contra el Celta, en Balaídos. Ni siquiera entonces estará echada toda la suerte, pues aún quedarán más de dos semanas para que finalice el mercado de verano. Para entonces, la era Diego Martínez ya será toda una realidad.