El descenso devalúa la plantilla del Pucela

Una de las consecuencias lógicas del doloroso descenso del Real Valladolid, plasmada en la última actualización de Transfermarkt, es la pérdida de valor de mercado de su plantilla, algo con lo que tendrá que lidiar Fran Sánchez, su nuevo director deportivo. El nuevo responsable de área deportiva tendrá encima de su mesa hasta 39 carpetas, entre las que habrá pocas con jugadores revalorizados en una temporada para el olvido.

No en vano, según el portal especializado, el plantel que finalizó el curso a las órdenes de Sergio González vale casi diez millones menos que en octubre, cuando comenzó la campaña; pasó de 69,1 millones (contando a Olaza y Kodro) a 59,9. De hecho, el único futbolista al alza en las dos revisiones posteriores, la de enero y la de este diez de junio, es Kike Pérez, que pasó de 'costar' 0,6 millones a 0,8 y, ahora, un millón.

Hay varios aumentos más; véase los de Bruno, Pablo Hervías o Waldo Rubio, además de los de Olaza y Kodro, cuyo crecimiento, sin embargo, es previo a su llegada al Real Valladolid. El más significativo, no obstante, es el de Marcos André, gracias a su buen inicio de temporada. La comenzó 'valiendo' 0,9 millones, pasó a tener un valor de mercado de cuatro a mitad de campaña y ha acabado con una cotización de 3,5 millones.

Esta, parece claro, se encuentra alejada del precio real, como sucede con sus compañeros, si bien sirven como estimación general de la importancia que los futbolistas pueden tener en el mercado. En este, la pérdida importante de valor la han sufrido jugadores como Masip, que ha bajado de 3,5 a dos millones, Nacho, que ha pasado de 2,5 a 1,2 millones, Roque Mesa, que se devaluó de cuatro a 2,5, o Sergi Guardiola, que valía cinco millones y ahora vale tres.