El infierno de Fayna Bethencourt en las redes sociales

La particular guerra entre Fayna Bethencourt y Carlos Navarro, más conocido como ‘El Yoyas’, continúa abierta. Si bien hace un año la justicia ya dictó sentencia de seis años de cárcel para él por violencia de género, la que fuera concursante de la segunda edición de ‘Gran Hermano’ todavía tiene que lidiar con el acoso en redes sociales. Y es que la canaria está siendo víctima de una oleada de “barbaridades, mentiras e infamia” que forman parte de una campaña de apoyo a su expareja y padre de sus dos hijos.

Así lo ha relatado la propia Fayna en sus redes. “Tengo claro que vienen del mismo sitio de siempre”, afirma ella. “Señores y señoras, estamos en una red social y no en u juzgado, que es donde se tratan las cosas de forma legal y seria. Insultar y mentir de esa manera sobre una persona, por estos lares, demuestra muchas cosas sobre las que lo hacen y no precisamente cosas buenas”, continúa relatando en su perfil de Instagram visiblemente molesta.

“Por mi parte, ya he recurrido a la ley para defenderme de toda esta locura que está inventando y difundiendo. La ley actuará al respecto”, dice sobre las medidas que ya ha tomado para revertir esta situación tan molesta. “Dejemos que actúe la justicia que es donde han ido a parar todas las cosas que publica esta gente y donde irá lo que puedan llegar a publicar”, añade. Fayna Bethencourt aprovecha sus palabras en las redes sociales para agradecer también todo el apoyo que está recibiendo por parte de otras mujeres que se han visto en la misma situación, y por supuesto, a todos sus fans.

La condena del ‘Yoyas’

A comienzos del pasado año, la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas ratificada la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal Número 5 de Las Palmas de Gran Canaria en la que se condenaba a Carlos Navarro como autor de siete delitos. Seis de estos delitos consumados en Fayna Bethencourt y de sus dos hijos, según informa ‘La Vanguardia’. Asimismo, el juez de lo Penal estimó una serie de indemnizaciones para las víctimas: 8.000 euros para su exmujer y 4.000 por cada uno de los menores. Unas cuantías “proporcionadas al daño moral inherente y sufrimiento inferido a la denunciante y a sus hijos, que han sido víctimas indirectas de las conductas de su padre hacia su madre.