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Assassin's Creed: Rogue

Assassin's Creed: Rogue

Assassin's Creed: Rogue, guía completa - Batallas navales

Cuestiona el credo que aprendiste con Altair, Ezio y Connor, surca cada rincón de los gélidos mares y supera con éxito tu cruzada particular con nuestra guía, consiguiendo por el camino todos los trofeos, los coleccionables y superando todas las misiones secundarias.

BATALLAS NAVALES

Los enfrentamientos en alta mar merecen una sección aparte. En Rogue, por muy hábil y avispado que seas en tierra, no llegarás muy lejos si no sabes manejar a la perfección el Morrigan.

Ante una flota de barcazas de pequeño tamaño, puedes ir a toda vela y destruirlas con el espolón, no hace falta ni usar los cañones. Pero ante un navío de gran tamaño, debes tener en cuenta esta serie de “truquitos”:

Echar el ancla y poner el navío a toda vela es peligroso, pero como medida para evitar ser destruido por cañones enemigos es una táctica bastante efectiva. El navío virará de una manera bestial, y es posible que algún iceberg cercano os impacte y acabe siendo peor el remedio que la enfermedad, pero merece la pena intentarlo.

Si prefieres no arriesgarte tanto y protagonizar un enfrentamiento directo, prueba lo siguiente: cuando estéis “cara a cara” apuntándoos con los cañones, para evitar ser atacado o reducir algo el daño infligido, vira de tal manera que cierres la trayectoria todo lo que puedas hacia el navío enemigo, de manera que los cañones de proa o popa no lleguen a acertaros. Saber reducir el daño forma parte del éxito en alta mar.

Por lo que respecta a los abordajes (ten en cuenta que se consideran tareas secundarias), es recomendable que los hagas todos. No para quedarte con el navío (de hecho, es recomendable que te olvides de esta opción y te centres en hacer del Morrigan un barco temible), sino para conseguir elementos como fragmentos de armas, tabaco, munición, lanzas o dinero.

Si, a pesar de lo dicho, quieres atacar un barco para quedártelo después, ataca a las velas e intenta no dañarlo demasiado: al quedártelo, asumes los costes de reparación (por esto es recomendable centrarte en el Morrigan: las reparaciones son caras y no hacen de la embarcación un transporte más fuerte). Haz arder las velas para detener su huida o persecución y acércate y pulsa BOTÓN CÍRCULO para abordarlo.

Por último, en cuanto a los fuertes, has de saber que estás en clara desventaja. Te dispararán desde posiciones elevadas y te tendrán flanqueado, por lo que partimos de la base que vas a ir a tomar los fuertes con el Morrigan mejorado. La mejor táctica es que vayas peinando la zona constantemente, dando vueltas y virando en los extremos rocosos frecuentemente para atacar con los cañones de babor una vez y con los de estribor a la siguiente. Si algún fuerte se te resiste sobremanera, trata de ahorrar algo de dinero para mejorar el Morrigan y regresar más preparado.

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