Assassin's Creed: Rogue
Assassin's Creed: Rogue, guía completa - Secuencia 3: El color del derecho
Cuestiona el credo que aprendiste con Altair, Ezio y Connor, surca cada rincón de los gélidos mares y supera con éxito tu cruzada particular con nuestra guía, consiguiendo por el camino todos los trofeos, los coleccionables y superando todas las misiones secundarias.
SECUENCIA 3
3.1. El color del derecho
Cruza el salón como buenamente puedas y gira a la derecha. Baja las escaleras y…
Atiza una buena paliza a los delincuentes que se han colado en casa hasta que salte una cinemática. Una vez salgas de la casa y te pongan un poco al día, trepa por el edificio de enfrente hasta llegar a los tejados.
Sube el ascensor rápidamente con BOTÓN R2 y verás al miembro que está huyendo. No es demasiado hábil, por lo que no te costará demasiado capturarlo (recuerda pulsar BOTÓN CÍRCULO mientras haces sprint para abalanzarte sobre él).
Tras hablar con él, tendrás que apoderarte de las instalaciones de la banda.
Lo más sencillo es que comiences por derribar la bandera. La tienes justo enfrente, sujetada por un pequeño arnés en el tejado de la caseta (es la de color anaranjado). Acto seguido, ya puedes moverte libremente para centrarte en el líder. Aproxímate y acércate a la multitud para camuflarte y usar tu vista de águila para poner la oreja en conversaciones ajenas.
Los susurros, en este tipo de actividades, son grandes aliados. El jefe intentará esconderse y es importante, además de para conseguir toda la sincronización, que seas lo más cauteloso posible.
Una buena táctica, si es que no lo encuentras con la vista de águila, es dejarte ver y comenzar una pelea. El líder acudirá un momento para atacarte y luego huirá. Te habrás expuesto, sí, pero ya habrás encontrado al líder. Es muy escurridizo, eso sí, por lo que tendrás que recurrir a artimañas como lanzarle tierra a los ojos o esquivar muy rápidamente sus ataques para no perder tiempo. Eso sí, ten en cuenta que, si te expones, es muy probable que no superes el objetivo opcional.
Tras ver el vídeo y conocer a un nuevo personaje…
Síguele por las callejuelas hasta que se te ordene reformar una capilla. Hazlo (y aprende para los demás edificios a reformar) porque es una inversión de futuro: tus ingresos se multiplicarán con el tiempo si reformas los edificios maltrechos.
Con la capilla reformada acabará la primera misión templaria.