Maravilla Martínez regresa a Estados Unidos

Sergio Maravilla Martínez (55-3-2, 30 KO) volverá a subirse al ring en Estados Unidos. El púgil argentino se enfrentará a Noah Kidd (6-6-2, 5 KO) en Orlando el domingo 11 de diciembre en un combate pactado a ocho asaltos en la categoría del peso medio. Será la primera vez que vuelva a Estados Unidos desde que anunció su retirada en 2014 después de caer derrotado ante Miguel Cotto (41-6-0, 33 KO). El argentino quiere volver a ser campeón mundial y tiene que ir moviéndose.

En 2014, con 39 años, Maravilla Martínez decidió alejarse de los cuadriláteros. La dura derrota ante Miguel Cotto, donde perdió sus títulos, y una lesión en la rodilla hicieron que el argentino dejase el boxeo. “Tenía una lesión muy grave, muy delicada, en la rodilla derecha de la que no me iba a poder recuperar por lo menos en dos o tres años, o quizá nunca. No podía ni caminar”, explica Martínez.

Aprovechó los años que estuvo fuera del deporte para “incursionar otros caminos que me gustaban mucho antes de dejar de boxear”. Maravilla Martínez participó en series y películas de televisión, en varias obras de teatro y trabajó dando charlas. “Nunca me quedé quieto. No fue un martirio para mí haberlo dejado, lo fue el último año de boxeo”, confiesa el argentino. Experiencias enriquecedoras que pudo vivir en esa etapa de su vida, y que las sigue viviendo a día de hoy. “De hecho, sigo siendo actor, vengo de protagonizar una película. No lo voy a dejar tampoco”, expresa.

En 2018 sucedió el “milagro”. Visitó unas aguas termales en su país que le curaron la lesión. “Yo no creo en los milagros, pero otra cosa no pude decir. Gracias a ellas pude volver a caminar bien, a apoyar mi pierna, el peso del cuerpo”, comenta. Su rodilla se curó y, después de mucho meditarlo, decidió regresar de la mano del entrenador Tinín Rodríguez. Dos años más tarde, se enfrentó a José Miguel Fandino (15-10-0, 8 KO) en agosto, y ganó por TKO en el séptimo asalto. En diciembre de ese mismo año, derrotó al finlandés Jussi Koivula (24-8-1, 9 KO) por TKO en el noveno round. El campeón estaba de vuelta.

La pandemia frenó su regreso. No pudo volver a subirse al ring hasta septiembre de 2021. Venció a Brian Rose (32-8-1, 8 KO) y después a Macaulay McGowan (16-3-1, 3 KO) por decisión unánime. “Al no poder competir en un año, uno pierde, no facultades, pero sí factores de relevancia que quedan disminuidos con el manejo del tiempo y distancia. Es como cuando un futbolista se lesiona y vuelve dos meses después, se dice que volvió bien, pero está falto de fútbol, la pelota le rebota o los pases que da son muy cortos o muy largos. En el boxeo es lo mismo, pero con puñetazos”, explica Martínez.

Ha llegado el momento de regresar a Estados Unidos para buscar las grandes peleas. “Yo no dejo de saber que tengo 47 años y que todos los boxeadores al lado mío son niños o apenas hombrecitos maduros, que me pueden destrozar”, admite el argentino, “Pero sé que soy el boxeador más longevo que hay en el mundo en la actualidad, y eso hace que me entrene con muchas más ganas, más compromiso”. Sus largos entrenos y duras preparaciones hacen que su rendimiento suba. “Somos estados de ánimo, y el mío está siempre por las nubes”, comenta Martínez.

El domingo se verá las caras con el púgil local Noah Kidd, que no tiene intención de ponérselo fácil. “Solo hay dos razones por las que yo me pueda equivocar: una es relajarme porque veo que el combate está ganado de antemano, y otra es apresurarme por querer terminar antes de tiempo”, revela el argentino, “Si yo puedo controlar esos dos factores, el combate está en el bolsillo y puedo ganar por KO”. Después de este choque, quiere pelear en febrero y mayo, para poder disputar y ganar el título mundial AMB entre los meses de junio y noviembre del próximo año. “Esto está en mi mente nada más, pero yo lo que proyecto lo puedo llevar adelante, lo hice siempre en mi carrera”, expresa Maravilla Martínez.