Pintus saca su magia
El Madrid encara la Supercopa de Europa con la enfermería vacía. Ni un lesionado. Sólo Carvajal dio un pequeño susto en la gira de Estados Unidos.
El ‘método Pintus’ funciona. Lo demuestra que el equipo no sólo va a llegar al pregón de la temporada 2022-23 lleno de gasolina; sino que además, sin explotar ningún motor. Y no es fácil. Porque la exigencia del preparador físico, mano derecha de Ancelotti, es descomunal, algo que reconoció el propio Modric, con un guiño de humor, tras una sesión en Los Ángeles: “Estamos corriendo mucho con Pintus, muchísimo, y es muy duro, la verdad. Pero al final es importante para estar bien el resto de la temporada”. El tiempo dirá cómo estará el equipo en enero, pero hoy, a escasos días de jugarse el primer título de la temporada, la Supercopa de Europa (10 de agosto, 21:00 horas), la enfermería de Valdebebas está desierta.
En todo el verano únicamente ha habido un pequeño susto: Carvajal. El lateral sufrió una aparatosa torcedura de tobillo el 22 de julio, lo que le hizo abandonar el campo de entrenamiento de la UCLA sin poder apoyar el pie; en aquel momento, la escena se dibujó preocupante. Pero las pruebas determinaron que no era más que eso, un esguince. El lateral guardó reposo y pudo volver para jugar el último amistoso, ante la Juventus. Los tobillos han traído al Madrid por el camino de la amargura en los últimos años: Ceballos, en aquellos Juegos Olímpicos de Tokio o Hazard, son algunos ejemplos de futbolistas que forzando, sólo empeoraron sus situaciones. Carvajal puso su foco en la Supercopa y llegará sin problemas. De hecho, ya lleva toda la semana entrenando con normalidad.
Dos amagos
El resto del equipo ha trabajado este mes sin sobresaltos. Mendy amagó con ello, también en Estados Unidos, alegando unas molestias en la zona donde suele llevar un vendaje, consecuencia de un dolor que ya es crónico. Pero apenas duró un día. Hazard acusó una sobrecarga y, como el francés, volvió sin perderse ni una sesión. Todos siguen sometiéndose a las exigencias de Pintus, que ultima sus últimos entrenamientos con mucha carga física: según se vaya acercando el 10 de agosto, empezará a haber más balón y menos sprints. El pasado jueves sorprendió con unas series para cerrar la sesión y el viernes, sin tiempo para respiros, al comienzo del entreno decretó ejercicios de explosividad y potencia. El preparador italiano lo tiene todo controlado. Vislumbra su éxito: ve a los jugadores al 200% y sin lesiones.
Radiografía
La temporada pasada el Real Madrid sufrió 62 lesiones. Este número, que a priori puede resultar muy elevado, debe ser visto desde la perspectiva de que un trauma, pese a que sólo aparte a un jugador 2-3 días, ya se considera oficialmente lesión. Es por ello que la clave está en el siguiente dato: de las 62, sólo 20 tuvieron una duración mayor a los 20 días. Benzema, Valverde y Alaba fueron los tres futbolistas -titulares- que más tiempo pasaron en la enfermería. El delantero estuvo algo más de tres semanas entre algodones por una microrrotura en el bíceps femoral: volvió en el Parque de los Príncipes. En el caso del Halcón, cayó mal en un salto con Piqué, en el Clásico del Camp Nou, y se hizo un esguince en el ligamento lateral de la rodilla izquierda (32 días de baja). Alaba fue el más reciente: el aductor le apartó en el Etihad y no pudo jugar la vuelta en el Bernabéu. Sólo tres episodios ‘especialmente graves’ en toda una temporada. Un bagaje difícil de superar. Un reto para este curso.