Peter Lim se sienta en la mesa de Mike Ashley

Peter Lim habla poco. Su última aparición en medios hablando del Valencia tiene fecha de mayo de 2021. Entonces concedió una entrevista a Financial Times en la que dijo: “Tener el Valencia CF ha sido increíblemente bueno para la creación de redes. Una vez estábamos cenando todos los dueños. Tienes jeques, reyes, mafia, negros, blancos y amarillos. Y estábamos discutiendo sobre ‘¿por qué compraste este club por tanto?’ Éramos como niños”. Pero Lim hace cinco años que no se sienta en la mesa de los dueños que compiten en Champions. O al menos no lo hace porque su club la vaya a jugar. Ni tan siquiera con los de la Conference League. Si a tales reuniones se llegara por los méritos de sus gestiones, Lim estaría en la mesa de Mike Ashley, cuya salida del Newcastle celebraron sus aficionados como el mayor título de sus vidas.

Peter Lim, así lo pensaban varios de los ejecutivos de Singapur que han pasado en los últimos años por Mestalla, temía ser un Ashley en Valencia. Y sin embargo se parece bastante. Ashley tuvo múltiples desavenencias con entrenadores (Kevin Keegan, Rafa Benítez…) por la ausencia de fichajes, como Lim con tantos otros; Ashley llevó al Newcastle a estar muy lejos de los puestos nobles de la Premier y hasta le llevó dos veces a segunda división, Lim se quedó hace un año cerca del descenso y un histórico como el Valencia comenzó este año sin otro objetivo que la “permanencia”, como verbalizó la presidenta Layhoon Chan; Ashley tuvo un divorcio público y notorio con los seguidores de las ‘urracas’ hasta el día de su adiós, como le sucede a Lim, que este domingo seguirá desde Singapur la séptima movilización en masa contra su gestión: el vaciado de Mestalla propuesto por LibertadVCF.

La diferencia de Mike Ashley respecto a Peter Lim es que el británico coqueteó en varias ocasiones durante sus años de propietario con la venta del Newcastle, aunque alargó su salida hasta octubre de 2021, cuando cerró el acuerdo con el fondo saudí Public Investmen Fund. Pero Lim, hasta la fecha, nunca ha dado pie ni tan siquiera muestras de plantearse una transacción del Valencia. Al contrario, a tenor del mensaje que siempre ha repetido Layhoon Chan cuando se le ha preguntado por las intenciones de Meriton Holding: “No tenemos intención de vender el club”. La presidenta, por cierto, no acude a una sala de prensa para hablar de nada desde febrero de 2023.

Lim, que lleva sin pisar Valencia 1615 días, desde el 16 de diciembre de 2019, que cumple una década como máximo accionista del Valencia, ha ido incrementando con los años su capacidad de control de la sociedad capitalizando préstamos. La suma total del dinero invertido por Lim en el Valencia ronda los 255 millones. La situación financiera del Valencia sería bastante peor sin su respaldo, si bien, Lim hace tiempo que perdió la ilusión por invertir por competir y se limita a tapar las pérdidas año tras año, intentando evitar tener que inyectar más dinero de su patrimonio a base de ventas de futbolistas y de reducir el coste de plantilla. De ahí que el Valencia vaya a por su quinto año consecutivo fuera de Europa. Sea como fuere, ahora, con las varias capitalizaciones de préstamos realizadas en los últimos años, el magnate asiático controla algo más del 91% del capital social cuando en 2014, tras comprar el club por 94 millones, tenía el 70′6% de las acciones del club.

Las respuestas de la afición del Valencia

El 9% del capital social del Valencia restante, en la actualidad, está repartido entre más de 45.000 pequeños accionistas, lo que ha convertido en prácticamente una quimera uno de los propósitos fundacionales de LibertadVCF, aglutinar al menos un 5% del capital social. La plataforma lleva años recogiendo delegaciones de acciones para tratar de alcanzar ese porcentaje, que le permitiría, entre otras acciones que se recogen en la ley de sociedades, poder interponer una acción de responsabilidad por la gestión de Lim. En este sentido, varios letrados consultados por AS consideran que la reciente sentencia del TSJCV respecto a la validez de la caducidad de la ATE podría dar pie a presentar por vía administrativa una demanda por acción de responsabilidad. Así lo creen porque el Tribunal remarcó que los gestores del Valencia “incurrieron en diversos incumplimientos”. Dichos incumplimientos, que propiciaron la nulidad de la ATE y en consecuencia de las ventajas económicas que suponían para el club, fueron “únicamente imputables” a la entidad de Mestalla. Pero ese 5% ni está ni se le espera tras las capitalizaciones de préstamos de Lim.

El valencianismo, ahí están los hechos, secunda en multitud medidas de protesta contra la gestión de Lim, como los cánticos y carteles amarillos en el minuto 19 de los partidos o las seis movilizaciones callejeras habidas hasta la fecha (cuatro manifestaciones y dos vaciados de Mestalla). Pero cuando a la masa social blanquinegra se le ha pedido dar un paso más allá de su mera presencia, las iniciativas han tenido poco éxito. Así, LibertadVCF aún no ha podido reunir ese 5% del capital social y De Torino a Mestalla tampoco recibió el respaldo esperado en su acción llamada 112, que consistía en saber mediante compromiso ante notario cuánta gente estaba dispuesta a poner dinero para presentar una oferta de compra a Lim. Solo se apuntaron 1.483, cuando la media de asistentes a Mestalla esta temporada supera los 42.000. Por ello, la plataforma que presidía el catedrático Juan Martín Queralt abortó la misión.

En Valencia hay unanimidad en cuanto a la repulsa por la gestión de Lim. El Valencia era el octavo en el ránking UEFA cuando llegó y ahora ocupa el puesto 94º. Pero a su vez se recela del interés de terceros para forzar la salida de Lim, estando de fondo el Nuevo Mestalla y todo lo que ello conlleva. El foco en las manifestaciones se pone también en los políticos, que tienen la llave para resolver ese entuerto urbanístico, unos partidos que velan en cada uno de sus movimientos por sus intereses particulares. Y en ese contexto político-social, LibertadVCF se ha convertido en el músculo popular de la oposición a Lim. Al menos en su capacidad de actuación. Sus llamadas a la movilización han ido calando y ganando adeptos desde la primera del 8 de mayo de 2021, una marcha cívica a la que acudieron unos 5.000 participantes bajo el lema “El futuro es nuestro”.

Tras aquella primera manifestación, llegó otra en diciembre de 2021 (“Por la dignidad del Valencia”, 15.000 asistentes), una más en junio de 2023 (“Juntos por el futuro del Valencia”, 15.000) y la última del pasado 2 de marzo (“Vuestra traición, nuestro sentimiento”, 20.000). Para este domingo está convocado un vaciado de Mestalla. Será el tercero que proponen: uno, el primero, fue un éxito, el del partido contra el Celta de mayo de 2022; otro, el segundo, tuvo menos seguimiento (se propuso no entrar hasta el minuto 19 en un duelo contra el Athletic). La convocatoria de este tercer vaciado generó debate mediático y en redes. No obstante, la derrota en San Sebastián, que dejó al Valencia sin opciones de pelear por Europa contra el Girona, alivia la decisión de muchos sobre la idoneidad o no de secundar el vaciado dado que La Quinta del Pipo ya no juega por nada.

Kevin Keegan, ídolo en el Newcastle y uno de los primeros azotes de Mike Ashley, dejó para la posteridad una frase cuando dejó de ser entrenador de las ‘urracas’ por discrepancias con el propietario: “Nunca abandonéis a vuestro club. Seguid apoyándolo, es vuestro club y confiad en mí, un día recuperaréis a vuestro club y será todo lo que queréis que sea. El Newcastle United es más grande que cualquier persona. Ahora duele, pero seguid adelante. Él es sólo un hombre y nosotros somos una ciudad, toda una población. Confiad en mí”. En Valencia, hoy en día, en quien se confía es en Rubén Baraja, que en la previa del duelo ante el Girona manifestó un deseo personal: “Me gustaría tener a la afición detrás en este último partido en casa y poder dedicarle un último esfuerzo”.

Lim verá el seguimiento del vaciado de Mestalla desde Singapur. En 2021, la imagen de las gradas del estadio prácticamente vacías mientras la Avenida Suecia estaba abarrotada de gente le costó el puesto a Anil Murthy (también tuvo que ver en su destitución la difusión en Superdeporte de unos audios poco ortodoxos del que fuera presidente) y propició el regreso de Layhoon Chan. La presidenta trajo aire que respirar en el día a día del club, en oficinas y Ciudad Deportiva, aunque su presencia en Valencia ni ha resuelto el tema del Nuevo Mestalla ni se ha reconducido la relación con la afición. En las oficinas del Valencia hay inquietud por saber la respuesta de la afición y las consecuencias que pudiera tener otra fotografía icónica como la del partido contra el Celta de hace tres años. Es una incógnita cómo se comportará el abonado, si accederá a su asiento para despedir a los chavales de Baraja, se quedará fuera para protestar o directamente lo verá todo desde casa. Lo único seguro es que el Valencia ha vendido 6.500, un público puntual de un día que se presupone que asistirá el encuentro contra el Girona.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.