Rubén de la Barrera, capítulo dos

Riazor se prepara para despedir la temporada regular con las pilas recargadas de ilusión tras una semana agitadísima. Óscar Cano ya es historia después de la derrota en Linares, despedirse del ascenso directo y volver a enfadar a una afición con la que jamás supo conectar. Su salida ha terminado con el regreso de Rubén de la Barrera al banquillo blanquiazul exactamente dos años después de su despido. El técnico coruñés ha generado una ola de positivismo y tranquilizado a una grada que se identifica con un entrenador nacido en A Coruña y deportivista hasta la médula. Con solo dos partidos de liga regular de margen, implantar su sello es una utopía. Su plan express para intentar el ansiado ascenso pasa por hacer rugir de nuevo el motor colocando dos o tres tornillos a su gusto y, sobre todo, recargando el depósito de gasolina de la confianza perdida.

La primera batalla será ante el Algeciras este sábado en Riazor (19:30 horas), aunque el frente real de la guerra se llama playoff. Para certificarlo, el Deportivo necesita un punto o que Celta B y Linares no ganen todo. Así, con la promoción de ascenso casi en la mano, el reto de Rubén de la Barrera pasa por recuperar sensaciones, recordar lo que es ganar y escalar lo máximo posible en la clasificación para intentar rascar el factor campo de cara al playoff. El Algeciras también está cerca de su objetivo, que en su caso es la permanencia. Cuatro puntos de colchón con seis por jugarse y cuatro equipos entre los andaluces y el descenso, también indican que el objetivo está muy cerca. Eso sí, la victoria en Riazor lo haría ya matemática.

Los de Iván Ania llegan al partido en un gran momento de forma. Cuatro partidos consecutivos sin encajar y una sola derrota en las últimas siete jornadas, así lo certifican. Enfrente esperará un Depor cuyo once es una verdadera incógnita tras el cambio en el banquillo. Parece seguro que Rubén de la Barrera continuará con el 4-3-3 de su antecesor, pero podría haber novedades en las piezas elegidas. La primera incógnita es si Lucas Pérez y su máscara están en condiciones de ser titulares o bien espera los minutos en el banquillo. El nombre de los laterales, la duda si habrá resurrección con Álex Bergantiños, el posible debut de Mella, la ubicación de Soriano… Dudas a resolver en un Riazor que vuelve sonreír y que homenajeará a los canteranos del Fabril por su ascenso a Segunda RFEF una vez pasado el duelo por el eterno Arsenio Iglesias.