BARCELONA

El drama de Isaac Cuenca: “No podría competir ni en la Kings League”

El exjugador del Barcelona narra los duros episodios por lo que ha pasado hasta dejar el fútbol. “Necesitaba dos trasplantes...”.

Isaac Cuenca, el que fuera jugador junto a Lionel Messi en el Barcelona, vive a sus 32 años ya alejado del fútbol. El excanterano blaugrana, que decidió dejar el club en 2013, desveló la parte menos positiva de este deporte. A él el fútbol le llevó a vivir episodios no demasiado agradables. En una entrevista en el diario ARA, el de Reus admitió que “el fútbol le destruyó”.

Lo más importante que me ha enseñado el fútbol es que no todo es como quieres. Si crees que eres muy bueno, hay otro mejor. Y si crees que eres buenísimo, quizás te lesiones y nadie te quiera. A mí me ha puesto en lugares que no me esperaba y mírame ahora, retirado con 30 años”, afirmó.

“Si crees que eres muy bueno, hay otro mejor”

Cuenca

En 2019 vivió una lesión que marcó para siempre su carrera profesional. “Solo podía entrenarme una vez por semana y después de los partidos se me ponía la pierna como una pelota. No me recuperaba bien y el médico me animó a que probara una última intervención porque no tenía cartílago y la tibia y el fémur chocaban mucho. Necesitaba dos trasplantes y volví al quirófano, pero no funcionó, así que dejé el fútbol”.

Su última aventura en el fútbol fue en las filas del Vegalta Sendai, de Japón. “Físicamente, estaba en Japón, pero sentimentalmente en Catalunya. Aprendí de bolsa, durante un tiempo invertí y me fue bastante bien. ¡Me leía unos ladrillos que tela marinera!”.

“Sé que ahora está de moda lo del coaching y tal, pero no lo he necesitado porque retirarme ha sido liberador. Después de la última intervención, la rodilla me dolía tanto que dejarlo correr me alivió. Claro que echo de menos el fútbol, pero el dolor físico era tan enorme que decidí que ya era suficiente. Quería tener una vida normal”.

“Después de la última intervención, la rodilla me dolía tanto que dejarlo me alivió”

Cuenca

Cuenca lanza un consejo: “Si te aferras a algo, puede acabar destruyéndote. Y siento que me ha pasado esto. Si me hubiera retirado año y medio antes, no habría sufrido tanto. Me he aferrado al fútbol y he acabado petando. No podría competir ni en la Kings League. Ahora he renacido”.

Salto al Barcelona

“Venía del Sabadell e intentaba disfrutar del césped bien cortado, de los desplazamientos, de los estadios... Pero en el fondo estaba descolocado. Con el tiempo les he entendido por qué aquel equipo tenía mucha presión. Venía de ganarlo todo. Sí que alguna vez flipaba con algunas cosas, pero, ostras, es que eran los mejores del mundo. Leo [Messi], Xavi , Andrés [Iniesta], Víctor [Valdés]... ¡Cómo tiraban del carro! Eran una pasada”. Eso quedará para siempre en su memoria, en la de los culés.

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