Atlético-Sevilla: el morbo está servido con el árbitro y el VAR
El extremeño Gil Manzano mosquea a ambos equipos y el canario Hernández Hernández, que volverá a la sala VOR, la lió en el Bernabéu el pasado fin de semana.
Morbo total con el arbitraje en el Atlético de Madrid-Sevilla de cuartos coperos que se disputa este jueves en el Metropolitano. En el club colchonero están que trinan con que Jesús Gil Manzano vaya a ser el colegiado principal del encuentro, pero es que en Nervión también ha sentado fatal la designación del extremeño, con el que no consiguen una victoria desde hace más de dos años. Ocho encuentros suma el Sevilla sin ganar con este árbitro. Al polémico nombramiento sobre el campo hay que sumar la presencia, de nuevo en el VAR, del hombre que ha centrado este último fin de semana una de las grandes polémicas arbitrales del curso, Hernández Hernández. Las decisiones del canario desde la sala VOR del Real Madrid-Almería han levantado muchas ampollas.
Los madrileños creen encontrarse en el punto de mira del árbitro de Don Benito, que la pasada temporada expulsó a Correa en el derbi del Santiago Bernabéu por un empujón a Rüdiger, decisión que luego se entendió desde muchos frentes como desmesurada. Su historia de tarjetas rojas con el Atleti se alarga desde que hace varias campañas, durante un encuentro en el Camp Nou, echara a Diego Costa por lo que él consideró “insultos graves”. Al ariete hispano-brasileño le cayeron ocho partidos de sanción. También expulsó a João Félix en un choque ante el Athletic y a Gabi, entonces capitán atlético, en un Atlético-Barça de 2015, de Copa. Esto último ocurrió ya en el túnel de vestuarios.
El Sevilla no gana con Gil Manzano desde que lo hiciera, también en Copa, ante el Córdoba el 1 de diciembre de 2021 en El Arcángel. A partir de entonces, ocho partidos con el extremeño y todos sin triunfo sevillista: en esa 2020-21, 0-1 en casa con el Athletic; en la 2021-22, empate en Villarreal (1-1); en la 2022-23, derrota en Almería (2-1) e igualadas ante Athletic (1-1), Rayo (1-1) y Betis (0-0); y en la campaña actual, derrota contra el Girona (1-2) y tablas en el derbi contra el Betis de la primera vuelta (1-1).
Precisamente en estos partidos de máxima rivalidad es cuando peor sabor de boca ha dejado a los sevillistas el árbitro pacense. Por ejemplo, por una durísima entrada del bético Miranda a Jesús Navas el pasado año. El lateral verdiblanco sólo fue expulsado tras la llamada del VAR, después de que Gil Manzano no viese suficiente la acción para mostrar tarjeta roja. En este tipo de derbis llovía entonces sobre mojado, porque en la 19-20, el mismo colegiado había decidido echar por segunda amarilla a Roque Mesa tras un encontronazo con Pau López. Luego, en las imágenes se intuía mayor culpa del portero verdiblanco que del centrocampista canario.
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