Alex Sola se pone en forma a 34 kilómetros por hora

Alex Sola se pone en forma a una velocidad endiablada: 34 kilómetros por hora. El donostiarra quiere dejar atrás su mala suerte con las lesiones y empezar a disfrutar de lo que tanto le ha costado ganarse: un sitio en el primer equipo como jugador de la plantilla de Imanol Alguacil a todos los efectos. Han sido años muy duros de trabajo, crecimiento paulatino, buenas actuaciones y lesiones, alguna incluso muy grave. El donostiarra ha sufrido más contratiempos de lo deseado en estos últimos años en los que su ascenso a la primera plantilla estaba cerca. Pero su nivel y proyección son evidentes, y la apuesta del club era muy clara: le ven como el lateral derecho del futuro en la Real. Tras una temporada que acabo de manera brillante en Segunda con el filial, a pesar de que tuvo que superar otra lesión de consideración, este verano pasado amplió su contrato con la Real hasta 2026 y recibió el compromiso del club de darle dorsal de la plantilla profesional. El ‘2′ nada más y nada menos.

Todo parecía ir sobre ruedas durante la pretemporada, cogiendo confianza y minutos a las órdenes de Imanol, hasta que se lesionó a una semana del comienzo de Liga. La mala suerte volvía a cerrarse con el lateral donostiarra. Se había preparado a conciencia para asumir con naturalidad la exigencia del trabajo con los ‘mayores’. El trabajo preventivo y de preparación de junio, junto a otros compañeros con los que había compartido banquillo en el filial, estaba dando sus frutos. Pero no contaba con ese contratiempo en forma de lesión muscular. Se perdió el inicio de liga y hasta finales de agosto no pudo volverse a unir al trabajo de grupo en Zubieta. Sin embargo, el donostiarra estaba dispuesto a aprovechar esta oportunidad, la confianza de una Real que demostraba su apuesta por Alex Sola, dejando salir a Joseba Zaldua al Cádiz. Se quedaba con Gorosabel como inquilino del lateral derecho, con el que desde que está recuperado ha alternado titularidades y suplencias en los últimos partidos.

Alex Sola ha aprovechado este parón en la competición para terminar de recuperarse del todo de las molestias que le impidieron empezar con normalidad la temporada. Esa lesión le ha impedido tener el mismo ritmo de competición que resto de sus compañeros, y eso le ha obligado a tener que ponerse a tono poco a poco, siguiendo un plan específico que le permitió estar pronto a disposición de Imanol Alguacil. Aunque físicamente todavía no estaba en su mejor momento.

El donostiarra pudo debutar esta temporada en la jornada 4, saliendo desde el banquillo contra el Atlético de Madrid y jugando siete minutos. Jugó otros seis minutos en Old Trafford contra el United. Y fue en la jornada 5 de liga cuando fue titular por primera vez, contra el Getafe, siendo uno de los destacados en la primera parte y demostrando su potencia para subir la banda y generar peligro. Pero el físico le dio para jugar 70 minutos. Contra el Omonia pudo salir de inicio por primera vez en Europa y aguantó un poco más, 75 minutos, evidenciando que daba un paso más en su puesta a punto. Ahora, superados esos problemas físicos, Sola sigue progresando en su estado físico, con niveles que evidencian que está muy cerca de su mejor estado de forma. Porque se le ha llegado a contabilizar una velocidad de 34 kilómetros por hora en sus arrancadas por la banda para sumarse al ataque de la Real Sociedad, un dato muy significativo. Sola está mentalizado para aprovechar todas las oportunidades que se le presenten en su primera temporada en Primera, consciente de la competencia que supone Andoni Gorosabel, con bastante más experiencia en la élite y del que quiere aprender todo lo que pueda. Imanol podrá disponer de su potencia al 100% desde ya de cara a este exigente tramo de la temporada.