17 años y tres rojas unen a Íñigo con Pablo Pinillos

Pablo Pinillos e Íñigo Sainz-Maza son dos futbolistas que comparten muchas cosas. Lo primero, el indiscutible compromiso con el Racing, su escudo y su afición, son, además, capaces de sacar el 120% de las cualidades que tienen (no tan excelsas como las que acompañan a otros, más talentosos), son muy regulares a lo largo de toda la temporada, tienen muy buena lectura de la dinámica de los partidos, son ganadores de duelos, a los que van de verdad, y ambos son adorados por El Sardinero. También les une que son los dos últimos jugadores que vistiendo la camiseta del Racing han sido expulsados en tres partidos de una misma liga, en la 2005-06, en Primera, el riojano, en la 22-23, en Segunda, el de Ampuero.

Con la tarjeta roja que le sacaron a Íñigo el sábado en La Romareda, casi calcada a la que le exhibieron ante el Burgos en la primera vuelta, ambas clavando los tacos en el tobillo del rival, ambas tras corrección del VAR del color de la tarjeta, ambas con siete compañeros por detrás de él, el capitán verdiblanco llega a la tercera del curso (hubo una, por doble amarilla, contra el Andorra). La expulsión de Zaragoza fue la más grave porque llegó muy pronto, al cuarto de hora, y cambió un partido igualado. Se da la circunstancia que en Segunda B y Primera RFEF, sin VAR, Íñigo había jugado 59 partidos con la camiseta del Racing y nunca había sido expulsado.

Tampoco fue Pablo Pinillos, pese a ser también bravo y un defensa expeditivo, un jugador que sufriera demasiadas tarjetas rojas en su trayectoria con el Racing. En 191 partidos con la camiseta verdiblanca, todos en Primera, el riojano solo fue expulsado en cinco ocasiones, las tres de la temporada de marras, ante Málaga, Villarreal y Betis, otra en la 2006-07, contra el Espanyol, y la última, en la 2008-09, ante el Athletic. Pero se da la circunstancia, además, que esta última expulsión le fue retirada por el Comité de Competición (fue aquel partido en San Mamés, 2-1, en el que el árbitro gallego González Vázquez entró en ebullición y sacó 19 tarjetas, cinco de ellas rojas).

Los poliexpulsados

El Racing, que curiosamente es el equipo de Segunda que más faltas recibe, no está mal situado, el 17º, en el ranking de amonestaciones recibidas, pero es al que más tarjetas rojas le han exhibido, muy por delante de todos los demás equipos de la categoría. Los santanderinos han sido expulsados en 12 ocasiones, mientras que sus perseguidores, por llamarlo de alguna manera, solo han visto 8 rojas.