LeBron y el récord de los 500 millones

LeBron James (Akron, Ohio, 1984) ha inscrito su nombre en la historia de la NBA de una y mil maneras. Es el jugador con más apariciones en el All-Star Game (20), el máximo anotador de siempre en la Liga y el primero en romper la barrera de los 40.000 puntos con 40.114 tras los 18 anotados esta pasada madrugada contra Sacramento Kings… Un suma y sigue de topes, grandeza, solo al alcance de un jugador único en su especie que no tiene fin: con 39 años ya son 21 temporadas en la Liga norteamericana, y parece que no quiere detenerse.

Por delante, el sueño, la ilusión de jugar con su hijo Bronny en la NBA. Y también la posibilidad de convertirse en el primer miembro de la Liga en superar los 500 millones de dólares firmados en contratos con franquicias, al margen de publicidad, marcas, patrocinios, cine… Una cifra que no le costará batir: ya acumula 483 millones de dólares entre Cleveland Cavaliers (en dos ocasiones), Miami Heat y Los Angeles Lakers.

Para elevarse por encima de los 500 millones, LeBron solo tiene que pulsar el botón de su opción de jugador por 51,4 millones para disputar su séptima temporada seguida con la franquicia angelina. Desde su primera etapa con Cleveland, James no ha estado tanto tiempo en un mismo equipo.

Sin embargo, el alero tiene en su mano otras tres opciones para que su cuenta corriente crezca un poquito más y su carrera se siga prolongando el tiempo… al menos tres años más. Según el convenio, los jugadores mayores de 38 años no pueden firmar por más de ese tiempo, aunque tampoco importa mucho porque los últimos contratos de LeBron han sido cortos: dos años con en 2020 y cuatro en 2018 con los Lakers, y dos con Cleveland en 2014.

Por un lado, puede directamente extender su contrato con los Lakers hasta 2027 por 164 millones (opción de jugador de 51,4+53,9+58,3). Por el otro, puede romper su acuerdo con los angelinos y firmar un nuevo acuerdo con ellos por 162 millones (50+54+58). Y la última posibilidad, buscar un nuevo hogar por 157,5 millones (50+52,5+55).

Esta tercera vía tendría un problema para James, ya que solo los Lakers pueden firmarle una cláusula anti-traspaso. Un no me vas a mandar a otro equipo que solo pueden llevar en sus contratos los jugadores con al menos ocho campañas en la NBA, con cuatro seguidas en un mismo equipo y cuyo nuevo acuerdo no sea una extensión, debe ser un contrato nuevo.