Pablo Motos recuerda cuando fue investigado por el CNI

Benedict Cumberbatch fue el estelar invitado de El Hormiguero la pasada noche, pero después de entrevistar a uno de los actores más queridos de la factoría Marvel, Pablo Motos dio paso a una amena tertulia de actualidad con Rubén Amón, María Dabán, Miguel Lago y Juan del Val. En esta ocasión, los temas iban desde el presunto espionaje a líderes independistas hasta la publicación por parte de El Confidencial de los audios de Gerard Piqué y Luis Rubiales sobre la organización de la Supercopa en Arabia Saudí.

Pero de una manera u otra, la conversación terminó desembocado en la seguridad de los aeropuertos, sobre la que Miguel Lago tiene una clara opinión. Y es que su frondosa barba le ha producido algún que otro problema a la hora de pasar el control policial antes de poder subir al avión: “Yo me tuve que recortar la barba desde la última vez que estuve aquí porque me paraban en todos los aeropuerto. Si no me paran, me mosqueo porque pienso que pasa cualquiera”.

Inmediatamente después aseguró que le parece completamente normal que le cacheen y le paren y confesó que no puede viajar a Estados Unidos. Pero “al menos no tengo pasado con amigos talibanes”, apuntaba. Según Pablo Motos, el nuevo colaborador estaba sacando “los trapos sucios”, puesto que el presentador fue investigado por el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) por una comprometida fotografía con un talibán.

Investigado por una foto en Denia

Tal y como ha recordado el presentador, se encontraba en una playa de Denia cuando se le acercó un hombre para pedirle una fotografía: “Viene un señor que se quiere hacer una foto conmigo y entonces estoy abrazando a un terrorista peligrosísimo”. “El CNI le captura, le mete en el talego y entonces ven la foto conmigo. Y dicen: ‘Este tío también es talibán’”, continuó.

Para demostrar que lo que estaba contando era totalmente verdad, Pablo Motos ha enseñado la fotografía de la discordia, una imagen en la que aparece en bañador junto a su compañero Damián y con un hombre al que abraza para la foto. “A mí lo que me vuelve loco es que por el día esté haciendo sus cosas de talibán pero a las 10 de la noche su El Hormiguero que no se lo pierde”, apuntó entre risas Miguel Lago.